En su última sesión de la segunda sala, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) tomó una decisión que encendió la mecha política: ordenar que se retiren de los libros de texto las referencias a expresiones racistas atribuidas a Lorenzo Córdova, ex presidente del INE.
Para la presidenta Claudia Sheinbaum, esta resolución no es un hecho aislado, sino el cierre simbólico de un ciclo judicial que, según dijo, ha estado marcado por liberación de delincuentes, usurpación de funciones legislativas y, ahora, racismo institucional.
El episodio que desató la indignación
Sin que mediara pregunta, Sheinbaum ordenó reproducir un audio que Lorenzo Córdova sostuvo con el entonces secretario ejecutivo del INE, Edmundo Jacobo Molina.
En esa llamada, Córdova se burlaba del acento de un dirigente indígena.
“Lo primero que debería haber existido era una disculpa pública. No la hubo. Mucha hipocresía: hablan de democracia, pero toleran el racismo”, reclamó.
La mandataria recordó que, en ese momento, Córdova encabezaba el INE, institución que debería proteger la democracia y defender los derechos de los pueblos indígenas.
Racismo, educación y memoria histórica
El ejemplo de Córdova, según Sheinbaum, se incluyó en los libros de texto para que las futuras generaciones entiendan que ninguna autoridad puede dirigirse con discriminación a un ciudadano.
“La educación pública debe dejar claro que en México no puede haber racismo, clasismo ni ninguna forma de discriminación”, afirmó.
Reforma judicial: la pieza que conecta todo
Para Sheinbaum, esta resolución de la Corte es una muestra más de por qué su gobierno impulsó la reforma al Poder Judicial.
Aunque no confirmó si habrá recurso legal contra la decisión, adelantó que la Consejería Jurídica ya analiza las opciones.
La política detrás del fallo
El momento no es menor: la 4T mantiene una batalla política abierta con la SCJN por casos como la liberación de reos de alto perfil y resoluciones que han frenado iniciativas clave del Ejecutivo.
En este caso, el trasfondo no solo es jurídico, sino también cultural y simbólico: se debate si un poder del Estado puede borrar de un libro de texto un hecho documentado por su carga de racismo.
El debate público y lo que viene
La discusión se trasladará inevitablemente a la opinión pública y a las redes sociales, donde el caso de Córdova y la postura de la Corte serán tema de conversación en los próximos días.
En paralelo, Sheinbaum y sus aliados podrían usar el episodio como bandera para reforzar el discurso sobre la necesidad de un Poder Judicial “más cercano al pueblo”.


TE PODRÍA INTERESAR