La administración de Donald Trump ha instaurado una de las políticas migratorias más restrictivas de la historia reciente, generando un impacto profundo en las comunidades migrantes, particularmente en las mexicanas. Desde la eliminación de programas como DACA hasta las deportaciones masivas, sus acciones han redefinido la relación entre ambos países, abriendo una crisis migratoria sin precedentes.
Deportaciones masivas: un golpe directo a las comunidades mexicanas
Desde su llegada al poder, Trump priorizó la deportación de millones de inmigrantes indocumentados. Miles de mexicanas y mexicanos que habían vivido durante décadas en Estados Unidos han sido regresados abruptamente a un país que, para muchos, resulta desconocido.
Principales cifras de deportaciones:
- En el primer año de su mandato, las deportaciones aumentaron un 30%.
- Más de 1.2 millones de mexicanos fueron expulsados entre 2017 y 2024.
- El impacto es mayor en los estados de Baja California, Michoacán y Guanajuato, que reciben a la mayoría de los deportados.
Este éxodo forzado no solo afecta a las personas deportadas, sino también a sus familias en México, muchas de las cuales dependen de las remesas para sobrevivir.
El fin de DACA y su impacto en los “dreamers”
En una de las decisiones más controversiales, Trump puso fin al programa DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia), afectando a más de 700,000 jóvenes dreamers, de los cuales un gran porcentaje son mexicanos.
Consecuencias principales:
- Jóvenes que crecieron en EE.UU. enfrentan el riesgo de ser deportados a un país que no conocen.
- Pierden acceso a permisos de trabajo y educación superior, limitando sus oportunidades de desarrollo.
Restricciones a la ciudadanía por nacimiento: un ataque a la enmienda 14
Trump intentó eliminar el derecho a la ciudadanía por nacimiento, una medida que contraviene la Decimocuarta Enmienda de la Constitución de Estados Unidos. Aunque esta orden ejecutiva fue bloqueada temporalmente por un juez, la simple propuesta ha generado incertidumbre entre las familias migrantes.
La respuesta insuficiente del gobierno mexicano
El gobierno de México, liderado por Morena, ha sido ampliamente criticado por su reacción pasiva ante estas agresivas políticas migratorias. Más allá de declaraciones condenatorias, las acciones concretas han sido limitadas:
Medidas implementadas:
- Tarjetas del Bienestar: Promovidas como apoyo económico, pero insuficientes para enfrentar la falta de empleo y seguridad de los deportados.
- Poca representación legal: A pesar de la gravedad de la situación, no se han establecido mecanismos sólidos para ofrecer asistencia legal a los migrantes en procesos de deportación.
El costo humano de las políticas antiinmigrantes
La narrativa de Trump no solo afecta a los migrantes directamente, sino que también fomenta un discurso de odio que amplifica la discriminación y el racismo en Estados Unidos. Además, las deportaciones masivas desmantelan comunidades enteras, separan familias y dejan a miles en la incertidumbre.
Historias humanas:
- José, un padre de familia deportado tras 20 años en California, lucha por empezar de nuevo en Guanajuato.
- María, una joven soñadora que perdió su beca universitaria tras la cancelación de DACA.
México: de puentes a muros
Irónicamente, mientras Trump endurece las fronteras desde el norte, México también ha intensificado el control migratorio en el sur. Bajo presión de Estados Unidos, el gobierno mexicano ha implementado medidas para contener la migración centroamericana, levantando barreras que contradicen su discurso humanitario.
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