En la madrugada del viernes, los cielos volvieron a encenderse con el rugido de los drones Shahed rusos, dejando tras de sí una escena desoladora: edificios residenciales colapsados, calles destruidas y 47 personas heridas. Era un nuevo golpe, otro capítulo en la guerra que se niega a terminar.
Volodimir Zelensky, presidente de Ucrania, no dudó en llamar las cosas por su nombre: “no había objetivos militares, ni podía haberlos”. La agresión fue, como tantas veces, contra la población civil. Las sirenas sonaron durante horas en Kharkiv, y los rescatistas no daban abasto en su intento por salvar vidas y rescatar cuerpos entre los escombros.
Los ataques no cesan: Zaporizhzhia también bajo fuego
El día anterior, Zaporizhzhia también sufrió un embate similar. Misiles y drones enemigos impactaron zonas industriales y residenciales. Más de 30 heridos fue el saldo inicial. En total, casi 80 personas afectadas en menos de 48 horas.
Zelensky volvió a hacer un llamado urgente a sus aliados. “Solo la fuerza y las sanciones obligarán a Rusia a detenerse”, declaró con firmeza, mientras pedía a Estados Unidos y Europa acciones contundentes para frenar a Vladimir Putin.
Trump se pronuncia y critica al Kremlin
En un giro inesperado, el expresidente Donald Trump criticó públicamente a Vladimir Putin por sus ataques recientes. En su red Truth Social, escribió:
“Putin no tenía ninguna razón para disparar misiles contra zonas civiles (…) tal vez no quiere parar la guerra y deba ser tratado de otra manera”.
Sus declaraciones sorprendieron, considerando su historial de cercanía diplomática con el Kremlin durante su mandato. Pero la gravedad del ataque pareció cambiar el tono.
Nuevas alianzas: Estados Unidos y Ucrania firman acuerdo económico
Pese al ruido de las bombas, Kiev dio un paso estratégico en la reconstrucción nacional. Se firmó un acuerdo para la explotación conjunta de minerales ucranianos, en colaboración con el Fondo de Inversión para la Reconstrucción Estados Unidos-Ucrania.
Yulia Svyrydenko, ministra de Economía de Ucrania, destacó que “los recursos naturales seguirán bajo control ucraniano, y las ganancias serán reinvertidas exclusivamente en el país”.
Este fondo, además de ser un símbolo de soberanía, representa una apuesta por el futuro en medio de la tragedia. Estados Unidos reafirma su respaldo económico, mientras las armas siguen hablando en el frente.
Síguenos en nuestro perfil de X La Verdad Noticias y mantente al tanto de las noticias más importantes del día.
TE PODRÍA INTERESAR