El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, aprovechó la cumbre virtual de los BRICS para lanzar un mensaje directo: la presencia militar de Estados Unidos en el Caribe representa un riesgo para la estabilidad de América Latina y el Caribe, una región que, desde 1968, se declaró zona de paz tras la firma del Tratado de Tlatelolco.
“La presencia de fuerzas armadas de la mayor potencia mundial en el mar Caribe es un factor de tensión incompatible con la vocación de paz de la región”, subrayó Lula.
El trasfondo: un despliegue militar en aguas cercanas a Venezuela
Las palabras de Lula llegan tras el reciente despliegue militar estadounidense que incluye ocho barcos con misiles y un submarino nuclear en el Caribe. Washington justificó la operación luego de un ataque contra una embarcación con presuntos narcotraficantes procedentes de Venezuela, lo que elevó las tensiones en la zona.
BRICS y la defensa del multilateralismo
En su intervención, Lula pidió a los BRICS —bloque integrado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica— hablar “con una sola voz” en los foros internacionales y, en particular, en la ONU, defendiendo el multilateralismo frente al unilateralismo que, según dijo, “no traerá justicia ni prosperidad”.
Brasil y la aspiración al Consejo de Seguridad
El mandatario brasileño también solicitó apoyo de sus socios para que Brasil logre un puesto permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU, una aspiración histórica del país.
Energía y sostenibilidad: entre el ideal y la realidad
Otro punto clave fue la transición energética. Lula recalcó que los países en desarrollo sufren más los efectos del cambio climático, pero admitió que, en la práctica, será necesario continuar utilizando combustibles fósiles como vía de financiamiento hacia una economía más sostenible.
Lula, Estados Unidos y la geopolítica en transformación
Desde el inicio de la guerra comercial desatada por Donald Trump, Lula ha buscado fortalecer los vínculos con sus socios BRICS, sobre todo con China, Rusia e India, desafiando la influencia estadounidense en la región. Para el presidente brasileño, el futuro de América Latina depende de una posición firme y unida: defender la paz y rechazar la militarización.
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