En medio de los escombros de Nuseirat, Israel anunció un ataque selectivo que habría terminado con la vida de Mesbá Salim Dayá, líder de las Brigadas Muyahidín. El grupo armado palestino, surgido como una escisión de Al Fatah en la Segunda Intifada, ha perdido a cuatro de sus principales jefes en apenas unos meses.
Para Israel, el operativo supone “un golpe directo a la dirección del terrorismo en Gaza”. Para los palestinos en el enclave, significa otra jornada de violencia que se suma a una guerra que ha dejado más de 63 mil muertos y 160 mil heridos, según fuentes gazatíes.
Mesbá Salim Dayá: el cuarto líder abatido
Dayá era señalado por Israel como el cerebro detrás del reclutamiento de combatientes en Cisjordania y como responsable de coordinar atentados contra objetivos israelíes. Su ascenso al liderazgo se dio tras la eliminación de sus tres predecesores, todos en operaciones de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).
Las autoridades militares subrayan que su grupo tuvo una participación activa en los ataques del 7 de octubre de 2023, jornada que cambió por completo la seguridad en la región.
Una guerra de líderes y símbolos
La historia de las Brigadas Muyahidín refleja la fragmentación del movimiento palestino. Desde su fundación en 2001, sus líderes han sido objetivo constante de Israel, pero el grupo sigue mostrando resiliencia y capacidad de reorganización.
Para los gazatíes, la eliminación de líderes no cambia la tragedia cotidiana: casas destruidas, familias desplazadas y la amenaza constante de la hambruna por el bloqueo al ingreso de ayuda humanitaria.
Cisjordania y el riesgo de expansión del conflicto
La tensión no se limita a Gaza. En Cisjordania ocupada, Israel asegura haber desmantelado una célula de Hamas que planeaba asesinar al ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, utilizando drones con explosivos.
La operación, confirmada por medios como Haaretz y The Times of Israel, evidencia el riesgo de que la guerra se expanda a otros territorios palestinos y reavive la violencia en toda la región.
La figura polémica de Itamar Ben Gvir
Ben Gvir, líder del partido supremacista Poder Judío, es uno de los rostros más controvertidos del actual gabinete israelí. Condenado en ocho ocasiones por delitos de racismo y apoyo a organizaciones extremistas, su discurso ha sido catalogado como incendiario incluso dentro de Israel.
Sus declaraciones sobre “matar de hambre a Gaza” mientras existan rehenes israelíes han provocado denuncias internacionales y cuestionamientos sobre la dirección política que toma el conflicto.
Un futuro incierto para Gaza y la región
La eliminación de Dayá podría suponer un freno temporal a las Brigadas Muyahidín, pero difícilmente detendrá el ciclo de violencia. Gaza sigue siendo un territorio devastado, con una población civil atrapada entre los ataques israelíes y el control de grupos armados.
Mientras tanto, la comunidad internacional continúa presionando para que se garantice la entrada de ayuda humanitaria y se retome el diálogo diplomático, aunque las posiciones de Israel, Hamas y los grupos aliados parecen más distantes que nunca.
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