El caso que conmovió al mundo en 2023 por la increíble supervivencia de cuatro niños indígenas en la selva amazónica colombiana ha dado un nuevo giro: el padre de dos de los menores ha sido condenado a 32 años de prisión por abuso sexual.
La Fiscalía de Colombia informó este sábado que Manuel Ranoque deberá cumplir una pena de 32 años de cárcel por los delitos de acceso carnal violento y actos sexuales contra una menor de edad, considerados como “conductas agravadas” por la justicia del país.
El caso que reveló los abusos
La condena se conoció semanas después de que una juez dictara el fallo en su contra a principios de julio. Sin embargo, faltaba que se fijara la sentencia de cárcel, la cual fue confirmada este fin de semana a través de un comunicado oficial publicado en la red social X por la propia Fiscalía.
La investigación contra Ranoque se intensificó luego del rescate de los cuatro niños indígenas, quienes pasaron 40 días en la selva tras un accidente aéreo en el que falleció su madre. Dos de los menores eran hijos de Ranoque.
Después del hallazgo, los menores fueron sometidos a valoraciones psicológicas por parte del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), lo que derivó en el inicio de los procesos judiciales por abuso sexual.
La recuperación de los menores
El ICBF mantuvo bajo custodia a los niños durante semanas, en lo que calificaron como un proceso de “recuperación física, emocional y espiritual”. Finalmente, en junio de 2023, los menores fueron entregados a familiares cercanos para continuar su cuidado.
Cabe recordar que la historia de los menores impactó globalmente no solo por el accidente aéreo, sino por la forma en que lograron sobrevivir en una zona inhóspita de la selva amazónica. La mayor de los hermanos —quien resultó herida en una pierna— lideró a los demás en la travesía, pese a sus limitaciones físicas.
Sin beneficio penitenciario
La Fiscalía no detalló en qué prisión cumplirá su condena Manuel Ranoque, pero confirmó que se trata de pena privativa de libertad sin beneficio de detención domiciliaria, dada la gravedad de los delitos.
El caso continúa generando reacciones en Colombia, donde se mantiene el seguimiento tanto a la evolución de los niños como al proceso judicial del padre.
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