Un puente que desafía la gravedad
El domingo, la provincia china de Guizhou celebró la apertura al tráfico del puente del Gran Cañón de Huajiang, que según medios estatales, se convierte en el puente más alto y de mayor longitud del mundo en una zona montañosa. Esta obra monumental se extiende sobre el río Beipan y conecta ambos extremos del cañón, ofreciendo una vista impresionante del paisaje y un hito en la ingeniería civil contemporánea.
Dimensiones récord y desafíos de construcción
El puente alcanza los 620 metros sobre el río y cuenta con una longitud total cercana a los 3.000 metros, incluyendo un tramo principal de 1.520 metros. Zhang Shenglin, ingeniero jefe del proyecto por Guizhou Highway Engineering Group Company, describió la obra como una construcción que se extiende sobre “la grieta de la tierra”, destacando la magnitud del reto técnico y la precisión necesaria para levantar esta estructura en un terreno montañoso y accidentado.
Tres años para acortar distancias y conectar regiones
Tras tres años de construcción, el puente reduce el tiempo de viaje de dos horas a apenas dos minutos, transformando la movilidad en la región y facilitando la conectividad entre comunidades aisladas. Expertos internacionales, como el profesor de ingeniería civil Mamdouh El-Badry de la Universidad de Calgary, señalan que un proyecto de esta envergadura usualmente requeriría entre cinco y diez años, considerando factores logísticos, ambientales y políticos, lo que resalta la rapidez con que se ejecutó esta megaobra.
Impacto turístico y económico
El puente no solo representa un logro de ingeniería sino también una estrategia para impulsar el turismo en Guizhou, uno de los objetivos declarados por las autoridades locales. Según Zhang Shenglin, la infraestructura busca posicionar a la región como un destino de clase mundial, atrayendo visitantes nacionales e internacionales que quieran experimentar la sensación de caminar o conducir sobre una de las estructuras más altas y largas del planeta.
Comparación con otros puentes icónicos
Antes de la apertura del puente de Huajiang, el viaducto de Millau en Francia ostentaba el récord del puente más alto del mundo, con 300 metros sobre el río Tarn y una longitud de 2.440 metros, sostenido por siete pilares de 340 metros de altura, más altos que la Torre Eiffel. Por su parte, el puente de Canakkale en Turquía es reconocido como el puente colgante más largo, con más de una milla de extensión. El puente de Huajiang supera estas referencias en altura y longitud dentro de zonas montañosas, consolidando a China como líder en ingeniería de grandes puentes.
Innovación y futuro de la ingeniería en China
El Gran Cañón de Huajiang se convierte así en un símbolo del poderío tecnológico y la capacidad de ejecución de China en proyectos de gran escala. Además de facilitar el transporte y el comercio, la infraestructura sirve como inspiración para futuras obras de ingeniería civil, mostrando cómo la combinación de innovación, recursos y planificación estratégica puede superar desafíos geográficos extremos y establecer nuevos estándares internacionales.
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