El dolor volvió a estallar en el norte de la Franja de Gaza. Este viernes, al menos 21 personas murieron tras un nuevo ataque del Ejército israelí cerca del cruce fronterizo de Zikim, justo cuando aguardaban la llegada de camiones con ayuda humanitaria.
El Hospital Shifa de Ciudad de Gaza, que ha estado recibiendo cadáveres diariamente desde esa zona, reportó que entre los fallecidos había niños y miembros de clanes locales que, en los últimos días, habían intentado proteger los convoyes con alimentos para que pudieran ser distribuidos de manera justa.
“Eran personas que querían mantener el orden. Los mataron mientras intentaban evitar el caos y el saqueo”, contó un testigo presencial a la agencia EFE.
Clanes locales: los guardianes improvisados de la comida
En medio del colapso del gobierno local y la destrucción sistemática de la infraestructura civil, algunos clanes gazatíes han asumido tareas de seguridad improvisadas. El testigo entrevistado por EFE explicó que su grupo se había posicionado cerca del cruce de Zikim con el fin de impedir que personas armadas con cuchillos, carros o tuk-tuks intentaran acaparar alimentos.
Estas patrullas civiles revisaban a quienes salían del área con más comida de la necesaria y trataban de redistribuir productos como fórmula para bebés, priorizando a madres que presentaban certificados de nacimiento.
«Así logramos mantener la paz entre la gente», dijo el hombre. «Hasta que un dron disparó contra nosotros. Murieron cuatro de mis compañeros».
El Ministerio de Salud eleva la cifra de muertos por comida
El Ministerio de Sanidad del Gobierno de Hamas informó que mil 383 personas han muerto desde octubre de 2023 en contextos relacionados con la espera o distribución de comida. Sin embargo, esta cifra no incluye a los 21 muertos del último ataque en Zikim.
Por su parte, la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos (OHCHR) ha registrado más de 500 víctimas directamente relacionadas con ataques en puntos de reparto de ayuda humanitaria.
Una crisis humanitaria que el mundo ya no puede ignorar
Desde el inicio de la ofensiva israelí tras los ataques de Hamás en octubre de 2023, más de 60 mil personas han muerto en Gaza, según cifras de diversas organizaciones.
La situación ha sido calificada de genocidio por países como Sudáfrica, que presentó una denuncia formal ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ). Organizaciones internacionales e incluso grupos israelíes de derechos humanos han utilizado el mismo término para describir lo que sucede en Gaza.
En medio del colapso, miles de gazatíes sobreviven con lo mínimo. La comida, antes un derecho básico, se ha convertido en motivo de muerte. El ataque en Zikim es solo uno más en una cadena de tragedias que golpean a una población ya devastada.
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