La molestia de habitantes de Dzemul, Yucatán, estalló luego de permanecer más de diez horas sin energía eléctrica.
Como medida de presión, un grupo de pobladores retuvo y ató a un poste a un empleado de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que realizaba reparaciones en la zona.
De acuerdo con versiones de los vecinos, el personal de la paraestatal les informó que el transformador averiado sería reparado hasta el día siguiente, lo que generó indignación entre más de 50 personas afectadas por los constantes apagones en la comunidad.
Ante la falta de respuestas inmediatas y la frustración acumulada, los habitantes recurrieron a esta acción extrema con la intención de exigir a la empresa una solución rápida a su demanda de servicio eléctrico estable.
Al lugar tuvieron que acudir elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Yucatán, quienes ayudaron a mediar la situación para la liberación del empleado.
Por su parte, personal de la CFE se comprometió a reparar a la mayor brevedad posible las averías en el sistema de suministro eléctrico, para poner fin a la molestia de los ciudadanos.
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