La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció que su gobierno trabaja para llevar a las escuelas del país la alianza entre FIFA, UNICEF y la Organización Mundial de la Salud (OMS). El objetivo: fomentar una vida saludable, la práctica del deporte y la construcción de una cultura de paz en las infancias.
Durante un encuentro con el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, Sheinbaum compartió la visión de implementar programas que utilicen el fútbol como herramienta pedagógica para promover la salud, la convivencia pacífica y la prevención de la violencia.
El fútbol como herramienta educativa
Infantino relató cómo, en una conferencia de prensa junto a la OMS, utilizó un balón como símbolo de unión y esperanza, provocando sonrisas entre periodistas. A partir de esa experiencia, nació la idea de que el fútbol puede convertirse en un instrumento de aprendizaje y transformación social.
Sheinbaum destacó que estos programas no tendrán costo alguno para el país, lo que permitiría una implementación amplia en el sistema educativo nacional.
La visión de Sheinbaum: deporte, salud y paz
La mandataria recordó cómo los mundiales de fútbol de 1970 y 1986 dejaron una huella en su niñez y juventud, despertando entusiasmo colectivo por el deporte. Ahora, busca aprovechar el impulso del próximo mundial para fortalecer la actividad deportiva y la vida saludable en México.
“Queremos tomar este impulso del mundial para impulsar con mayor fuerza el deporte en el país”, afirmó Sheinbaum, subrayando que el programa sería gratuito y de gran impacto social.
Impacto en las infancias
La iniciativa no solo pretende incentivar el deporte, sino también enseñar valores de respeto, disciplina y convivencia pacífica. Con ello, se busca reducir la violencia escolar y promover entornos más saludables para el desarrollo integral de niñas y niños mexicanos.
Además, la alianza FIFA-UNICEF en México reforzaría el prestigio internacional del país en materia de programas sociales y educativos, alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.
De concretarse, la alianza FIFA-UNICEF impulsada por Claudia Sheinbaum podría convertirse en uno de los programas más relevantes de su administración en materia de educación, salud y deporte. Una apuesta por transformar el fútbol en un motor de vida saludable y cultura de paz para las próximas generaciones.
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