Reconocimiento histórico de España a los pueblos indígenas
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, calificó como “un primer paso” el discurso del ministro español José Manuel Albares, quien por primera vez lamentó las injusticias cometidas contra los pueblos indígenas durante la Conquista, en el marco de la exposición “La mitad del mundo: La mujer en el México indígena” en Madrid.
Sheinbaum destacó que es la primera vez que un funcionario español utiliza palabras como “injusticia” y “lamentamos” para referirse al dolor histórico de los pueblos originarios de México, considerándolo un gesto diplomático que abre la puerta a la reconciliación y al reconocimiento de la historia compartida entre ambos países.
Decisión de no invitar al rey de España
La mandataria recordó su decisión de no invitar al rey Felipe VI a su toma de posesión, una acción que se basó en convicciones personales y en la defensa de la dignidad del pueblo mexicano. Esta decisión, explicó Sheinbaum, buscaba responder a la falta de respuesta de España ante la carta que envió el entonces presidente López Obrador solicitando un perdón oficial.
La presidenta resaltó que la ofensa no fue únicamente hacia el ex mandatario, sino hacia toda la nación y los pueblos originarios, y que su decisión fue también un acto de justicia histórica y ética.
Primer paso hacia la reconciliación
Sheinbaum calificó el discurso de Albares como un “primer paso” que reconoce la importancia de remediar los agravios históricos y contemporáneos. Señaló que el perdón y el reconocimiento no son humillantes, sino que engrandecen a los gobiernos y a los pueblos al integrar los hechos históricos dentro de la memoria colectiva.
Destacó que este gesto adquiere especial relevancia en el Año de la Mujer Indígena, dado que las exposiciones en Madrid están dedicadas a visibilizar el papel histórico y actual de las mujeres indígenas mexicanas.
Legado de las mujeres indígenas y resistencia histórica
La presidenta también presentó el prólogo del libro “Mujeres del maíz y del cosmos: arte indígena de antes y de ahora”, donde enfatiza que la Conquista fue un proceso brutal de imposición y despojo que afectó especialmente a las mujeres indígenas. Señaló que estas resistieron en silencio y acción, protegiendo saberes ancestrales, lenguas, tradiciones y la vida comunitaria.
Sheinbaum destacó que honrar este legado implica reconocer abusos pasados y actuales, así como erradicar la discriminación, racismo y desprecio hacia los pueblos originarios, considerando que hacerlo es un deber ético para alcanzar un mundo verdaderamente justo.
Exposiciones como puente cultural y diplomático
La presidenta explicó que las exposiciones en Madrid surgieron del proceso de visibilizar a los pueblos indígenas en España y que están vinculadas con la solicitud de perdón hecha por López Obrador. A través de las 435 piezas de arte precolombino y contemporáneo, se busca mostrar el papel central de la mujer indígena y su contribución a la cultura, la historia y la sociedad mexicana.
Estas muestras se han convertido en un puente cultural y diplomático, permitiendo acercar la historia compartida de México y España desde un enfoque de reconocimiento, respeto y memoria histórica.
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