La próxima visita del Papa León XIV a México comienza a tomar forma. En una reunión privada de alto nivel, la Secretaría de Gobernación (SEGOB) y el Vaticano coordinarán los primeros pasos de lo que podría convertirse en un evento histórico para el país. La presidenta Claudia Sheinbaum confirmó que la invitación al nuevo Sumo Pontífice fue entregada personalmente por la titular de SEGOB, Rosa Icela Rodríguez.
La noticia surge tras el arribo a México de monseñor Paul Richard Gallagher, Secretario para las Relaciones con los Estados de la Santa Sede, quien permanecerá varios días en territorio nacional. Su estancia tiene como eje principal revisar los pormenores logísticos y diplomáticos que requerirá la esperada visita del pontífice peruano-estadounidense.
Una invitación directa desde México: el rol de Rosa Icela
Fue en mayo pasado, durante la ceremonia que marcó el inicio del pontificado de León XIV, cuando Rosa Icela Rodríguez entregó personalmente una carta de invitación firmada por Sheinbaum. El gesto, cargado de simbolismo, ocurrió poco después del fallecimiento del Papa Francisco y en el marco del cónclave que dio paso al nombramiento del nuevo líder espiritual de más de mil 400 millones de católicos.
“Rosa Icela se va a reunir con él, recuerdan que ella fue a invitarlo de parte del gobierno de México”, declaró Sheinbaum al ser cuestionada por periodistas sobre la visita de Gallagher. Aunque no se han revelado todos los detalles, se confirmó que el encuentro no tendrá lugar en instalaciones oficiales del gobierno federal, reforzando el carácter protocolario y reservado de la reunión.
Reunión privada, mensaje público
En cuanto a la naturaleza del encuentro, la secretaria de Gobernación fue clara: “Preferiría que lo informara la diócesis o el personal de la iglesia católica, porque somos invitados a una reunión privada”. Sin embargo, también se dejó abierta la posibilidad de emitir un comunicado conjunto tras la reunión para informar a la ciudadanía sobre los acuerdos alcanzados.
Claudia Sheinbaum subrayó que no existe ningún tipo de secreto, pero sí un respeto a las formas diplomáticas y religiosas. “Quizá después de la reunión se emita un comunicado conjunto para que se pueda conocer lo que se vio… No hay nada secreto, sino sencillamente guardar las formas”, apuntó.
¿Quién es León XIV, el nuevo Papa?
Robert Francis Prevost, de nacionalidad peruano-estadounidense, fue elegido el pasado 8 de mayo como el Papa número 267 de la historia de la Iglesia. Desde el balcón de la Plaza de San Pedro, bajo el nombre de León XIV, dirigió sus primeras palabras a la multitud reunida en el Vaticano: agradeció a su antecesor Francisco y rezó por la paz global.
“Queremos ser una iglesia sinodal, misionera y acogedora que construya puentes de diálogo”, proclamó el pontífice, dejando clara su visión renovadora. Su elección representa una nueva etapa en el Vaticano, con miras a fortalecer la conexión entre la iglesia y sus fieles, particularmente en América Latina, una región clave para el catolicismo mundial.
Un viaje con implicaciones históricas y diplomáticas
La eventual llegada de León XIV a México no solo será un evento espiritual, sino también diplomático. Se espera que la visita del Papa refuerce los lazos entre el Estado mexicano y la Santa Sede, en un momento en el que el nuevo gobierno busca proyectar una imagen de apertura y diálogo interreligioso.
En el pasado, las visitas papales a México han congregado a millones de personas y han marcado hitos en la historia contemporánea del país. De concretarse, el viaje de León XIV podría tener un impacto profundo en la vida religiosa, social y política de los mexicanos.
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