Desde la ciudad de Guanajuato, los periodistas Paco Marín y Javier Quintero recibieron este miércoles 3 de diciembre una mención de honor en el Premio Nacional de Periodismo 2024, dentro de la categoría de Entrevista, por su trabajo “Retrato íntimo de una madre inquebrantable”, publicado en tres entregas en diciembre de 2024.
La vigésima cuarta ceremonia se celebró en la Universidad de Guanajuato, institución que este año fungió como sede oficial del certamen y que preside el Consejo Ciudadano del premio.
El trabajo, difundido por La Verdad Noticias, fue reconocido por el jurado entre más de mil trabajos participantes a nivel nacional. Solo 12 piezas llegaron a la final, y esta fue la única perteneciente a la prensa tradicional, lo que dio al reconocimiento un valor simbólico adicional en un contexto dominado por los contenidos digitales y las plataformas inmediatas.
El reconocimiento fue entregado por integrantes del Consejo Ciudadano del Premio Nacional de Periodismo, por miembros del jurado y autoridades universitarias, encabezadas por la rectora Claudia Susana Gómez López, quien subrayó que este galardón es el resultado de una evaluación colectiva, democrática y rigurosa.
El jurado destacó que el trabajo no solo cumple una función informativa, sino que convierte la desaparición forzada en una experiencia narrativa profundamente humana. “Trasciende la función básica de informar y logra una inmersión emocional basada en un proceso sólido de investigación, entrevistas y reconstrucción de los hechos·, expresaron.
Una mención que honra la memoria y el periodismo humano
Paco Marín indicó que ‘Retrato íntimo de una madre inquebrantable’ nació de una convicción profunda: que el periodismo no solo documenta los hechos, sino que también protege la memoria y humaniza las cifras.
“Detrás de cada número de personas desaparecidas hay una historia que respira, que sufre, que espera. Nosotros solo pusimos palabras a una búsqueda que no termina. Este reconocimiento no es un punto final, es una responsabilidad mayor para seguir narrando lo que incomoda, lo que duele y lo que muchas veces se quiere ocultar”, afirmó.
Marín resaltó que este reconocimiento ha sido resultado del trabajo colectivo que se realizó de la mano de Deysi Blanco, madre de Fernanda Cayetana la menor desaparecida en la zona peninsular de Isla Mujeres desde 2022.
“Durante meses caminamos con ella, escuchamos silencios, volvimos a los lugares donde todo cambió. Esta mención nos recuerda que el periodismo todavía puede tocar fibras profundas y generar conversación desde la dignidad de las víctimas”, comentó.
“Este premio es un respiro para el periodismo que resiste”: Javier Quintero
Por su parte, Javier Quintero destacó que el reconocimiento trasciende lo personal y se convierte en un mensaje para el periodismo local de todo el país. En su mensaje, destacó quela resistencia de la prensa escrita frente a los cambios tecnológicos acelerados.
“Este es un respiro para el periodismo local y, sobre todo, para el periodismo escrito que se niega a desaparecer y que resiste con éxito ante el embate de las nuevas tecnologías, del periodismo rápido que se hace digitalmente y del avance contundente de la Inteligencia Artificial. Recibir esta mención en un trabajo construido desde la calle, desde el contacto humano, nos confirma que todavía hay espacio para las historias hechas con tiempo, con profundidad y con conciencia social”, expresó.
Añadió que el reconocimiento también pertenece a las personas que confiaron en los periodistas para contar su historia.
“Nada de esto sería posible si las víctimas no abrieran su dolor para convertirlo en memoria y en denuncia. Este premio es, sobre todo, para esa madre que nos permitió acompañarla en uno de los recorridos más dolorosos que puede tener un ser humano”, sostuvo.
Un jurado que reconoció el rigor y la narrativa
La evaluación estuvo a cargo de un jurado integrado por 21 especialistas en periodismo, comunicación, investigación y docencia. La rectora general de la Universidad de Guanajuato, Claudia Susana Gómez López, destacó que el proceso se basó en la calidad, la pertinencia social y el rigor periodístico.
“Es un ejercicio democrático que reconoce la calidad y no la influencia, la evidencia y no la opinión, el compromiso público y no los intereses particulares”, subrayó durante la ceremonia.
Para construir “Retrato íntimo de una madre inquebrantable”, ambos periodistas dedicaron meses a entrevistas extensas, recorridos de campo, reconstrucciones de hechos y revisión documental. El objetivo fue claro: honrar la verdad de una madre atravesada por la ausencia de su hija y ofrecer una mirada honesta sobre uno de los problemas más graves de México.
Con esta mención de honor, el periodismo narrativo que se hace desde lo local vuelve a hacerse visible en el escenario nacional. Una prueba de que, incluso en medio de la velocidad digital, las historias contadas con rigor, tiempo y humanidad siguen dejando huella.
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