La práctica médica exige años de preparación, ética y profesionalismo, pero ¿qué ocurre cuando alguien se apropia de un título sin la debida certificación? Este es el caso de Marilyn “N”, quien ha sido vinculada a proceso en Puebla bajo acusaciones de usurpación de profesión al presuntamente hacerse pasar por psiquiatra sin acreditación oficial.
Con una medida cautelar de prisión preventiva justificada y un plazo de dos meses para la investigación complementaria, el caso ha generado polémica en plataformas digitales y entre expertos en salud mental, cuestionando cómo pudo operar sin ser detectada por tanto tiempo.
La detención de Marilyn “N” en Tlaxcala
El jueves 21 de noviembre, la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) en colaboración con su homóloga en Tlaxcala, llevó a cabo la detención de Marilyn “N”. Este operativo se dio en cumplimiento a un mandamiento judicial emitido tras descubrirse que ejercía como psiquiatra sin contar con la certificación requerida.
La Fiscalía de Tlaxcala confirmó que durante el arresto se aseguró una licencia de conducir a nombre de la acusada, emitida en enero del 2024, y otros documentos que reforzaron las pruebas en su contra.
“Neuropsychology Clinic: Marilyn Cote”, el consultorio clausurado
El caso comenzó a desenredarse el pasado 19 de noviembre, cuando la Dirección de Protección Contra Riesgos Sanitarios (DPRIS) clausuró de manera definitiva el consultorio “Neuropsychology Clinic: Marilyn Cote” en Puebla. Según la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), el consultorio presentaba irregularidades que encendieron las alarmas de las autoridades.
Entre las denuncias se mencionaron prácticas médicas sin certificación, diagnósticos erróneos y el uso de tratamientos cuestionables. Este contexto llevó a una investigación más profunda que culminó con la aprehensión de Marilyn “N”.
Reacciones en redes sociales y entre expertos en salud mental
El caso ha tenido gran repercusión en redes sociales, donde usuarios y expertos han compartido testimonios que critican la falta de controles para detectar a profesionales falsos en el sector de la salud.
Algunos usuarios denunciaron haber acudido al consultorio de Marilyn “N”, relatando diagnósticos imprecisos y tratamientos inefectivos. Esto plantea preguntas importantes sobre la responsabilidad regulatoria de las autoridades sanitarias y los riesgos para los pacientes.
Por otro lado, especialistas en salud mental destacaron la necesidad de reforzar los sistemas de verificación de credenciales para garantizar que quienes ejercen la psiquiatría cuenten con las acreditaciones necesarias.
El proceso legal y las implicaciones para el sector médico
Marilyn “N” enfrenta un camino legal complejo. La prisión preventiva justificada busca garantizar su presencia durante el proceso judicial, mientras la FGE continúa recopilando pruebas y testimonios que permitan esclarecer el caso.
De confirmarse las acusaciones, el caso podría sentar un precedente importante para combatir la usurpación de profesiones, un delito que pone en riesgo la vida y la seguridad de los pacientes.
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