Fue este miércoles 16 de enero de 2025 cuando la tranquilidad del Barrio San Isidro, en Chimalhuacán, Estado de México, se vio abruptamente interrumpida por una fuerte explosión provocada por la detonación de un polvorín clandestino. La onda expansiva no solo sacudió la zona, sino que dejó un saldo trágico: una persona perdió la vida y al menos seis resultaron gravemente heridas.
Ante la magnitud del siniestro, la Guardia Nacional activó de inmediato el Plan DN-III-E, un protocolo de auxilio en casos de desastres, con el fin de garantizar la seguridad perimetral y permitir las labores de rescate y atención médica. Mientras los equipos de emergencia trabajaban en la zona, los vecinos se sumaron a la búsqueda de sobrevivientes entre los escombros.
¿Qué es el Plan DN-III-E y por qué es clave en emergencias?
La #GuardiaNacional activó el #PlanDNIIIE tras registrarse la explosión de un polvorín en el municipio de #Chimalhuacán, #EdoMéx. En la zona se brinda seguridad perimetral para facilitar las tareas de los cuerpos de emergencia. pic.twitter.com/i6FrMcRxs8
— Guardia Nacional (@GN_MEXICO_) January 16, 2025
El Plan DN-III-E es una estrategia de auxilio creada por la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) en 1966, diseñada para responder a emergencias y desastres naturales. Su implementación en Chimalhuacán ha permitido coordinar las acciones de las fuerzas federales, estatales y municipales para contener los riesgos tras la explosión.
Objetivos principales del Plan DN-III-E:
- Protección de la población en zonas de desastre.
- Coordinación de las fuerzas de seguridad y rescate.
- Control de incendios y mitigación de riesgos adicionales.
- Evacuación y atención de personas afectadas.
- Revisión estructural de inmuebles en la zona afectada.
Chimalhuacán y el problema de los polvorines clandestinos
🚨🤯~ Fuerte explosión en Chimalhuacán
— El Valle (@elvallemexico) January 16, 2025
La tarde de este miércoles, se registró una explosión en San Isidro Tlaixco, donde un domicilio presuntamente utilizado para la fabricación clandestina de pirotecnia explotó.
La detonación ocurrió alrededor de las 18:00 horas y afectó… pic.twitter.com/vOMZDFrBh8
Chimalhuacán, al igual que otros municipios del Estado de México, ha sido escenario de múltiples incidentes relacionados con la fabricación y almacenamiento clandestino de pirotecnia. A pesar de los operativos y regulaciones, estos talleres ilegales continúan operando debido a la alta demanda de fuegos artificiales, especialmente en temporada festiva.
Según datos de la Coordinación Nacional de Protección Civil, el 70% de los accidentes con pólvora en el país ocurren en zonas urbanas, afectando a familias enteras que habitan cerca de estos talleres ilegales. La explosión en el Barrio San Isidro es un reflejo de la falta de regulación y los riesgos que enfrentan estas comunidades.
Consecuencias y medidas tomadas por las autoridades
Tras el estallido, equipos de bomberos, paramédicos y elementos de seguridad se movilizaron para atender la emergencia. Además de la persona fallecida y los heridos, varias viviendas cercanas sufrieron daños estructurales, lo que obligó a la evacuación de algunas familias.
Acciones inmediatas tomadas por las autoridades:
- Cierre del perímetro para evitar nuevos incidentes.
- Revisión de la zona para descartar más explosivos.
- Atención médica y psicológica para las víctimas y sus familiares.
- Investigación oficial para identificar a los responsables del polvorín clandestino.
- Evaluación de daños en viviendas cercanas a la explosión.
Cabe destacar que el gobierno estatal aún no ha emitido un posicionamiento oficial, pero se espera que en los próximos días se anuncien medidas para prevenir nuevas tragedias relacionadas con la pirotecnia ilegal.
¿Qué sigue después de la tragedia?
La explosión en Chimalhuacán deja en evidencia la urgencia de fortalecer la regulación y vigilancia en la fabricación de fuegos artificiales. Aunque la activación del Plan DN-III-E ha permitido mitigar los efectos de la emergencia, la prevención sigue siendo el mayor reto para las autoridades.
Se espera que las investigaciones en curso arrojen resultados que permitan sancionar a los responsables, además de reforzar las campañas de concientización para evitar la compra y fabricación clandestina de pólvora.
¿Qué medidas se deben tomar para evitar futuras tragedias?
- Fortalecer operativos en zonas con antecedentes de polvorines clandestinos.
- Endurecer sanciones contra la fabricación y almacenamiento ilegal de pólvora.
- Crear zonas seguras para la producción regulada de pirotecnia.
- Promover campañas de concienciación sobre los riesgos de la pirotecnia ilegal.
- Mejorar los protocolos de emergencia para responder con mayor rapidez ante este tipo de accidentes.
La explosión en Chimalhuacán es un llamado de atención sobre la importancia de la prevención y la rápida acción de las autoridades. La activación del Plan DN-III-E fue clave para atender la emergencia, pero queda claro que el problema de la pirotecnia clandestina es un desafío aún sin resolver en el país.
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