La escena se repite desde el amanecer: helicópteros del Ejército Mexicano surcando cielos grises, cargados con despensas, agua y medicinas. Abajo, cientos de personas levantan las manos, esperando la ayuda que no puede llegar por tierra. Así se vive la emergencia que mantiene incomunicadas a 191 comunidades en cinco estados del país.
Las lluvias más intensas de los últimos años dejaron un saldo devastador: 111 municipios afectados, 376 carreteras dañadas y 54 puentes colapsados, según reportó la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT).
Puentes aéreos: la línea de vida de miles de familias
“En algunos lugares, la gente ayuda a abrir espacio para que los helicópteros aterricen”, relató la presidenta Claudia Sheinbaum, visiblemente conmovida por la magnitud del desastre.
Desde las bases aéreas en Zimapán, Zacualtipán y Pachuca, las Fuerzas Armadas han desplegado 41 helicópteros y más de 8 mil 300 efectivos para atender la emergencia. Su misión: abastecer 111 municipios, de los cuales 69 fueron clasificados como prioritarios.
Los estados más golpeados son Veracruz, Hidalgo y Puebla, donde el aislamiento ha complicado el acceso a alimentos, agua potable y atención médica. En Hidalgo, por ejemplo, se contabilizan 28 municipios con severas afectaciones y 47 caminos aún cerrados.
Una respuesta coordinada ante la tragedia
El general Ricardo Trevilla, de la Secretaría de la Defensa Nacional, informó que se han repartido más de 75 mil despensas, 185 mil litros de agua y 44 mil raciones calientes. Además, se han evacuado 344 personas, algunas mediante helicópteros y otras por vía terrestre o lancha.
La Secretaría de Marina también participa con 4 mil elementos, drones, embarcaciones y plantas potabilizadoras. Mientras tanto, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) trabaja para restablecer el suministro eléctrico, que ya alcanza un avance del 92 %.
Sheinbaum confirmó que hasta el momento se han censado más de 13 mil viviendas afectadas, y anunció que el próximo lunes se presentará un diagnóstico general sobre los daños y las necesidades de reconstrucción.
Voces del territorio: resiliencia en medio del aislamiento
En las comunidades más remotas, los habitantes se organizan para despejar caminos o recibir los víveres lanzados desde el aire. “Nunca habíamos estado tanto tiempo incomunicados”, cuentan los vecinos de Poza Rica, uno de los municipios más afectados junto con Álamo y El Higo.
El aislamiento no solo ha dejado daños materiales, sino también una profunda huella emocional en los habitantes que llevan días sin comunicación, sin energía eléctrica y con la incertidumbre de cuándo volverá la normalidad.
La reconstrucción: el siguiente gran reto
Jesús Esteva, titular de la SICT, informó que ya se trabaja en fichas técnicas por municipio para planificar la reconstrucción de carreteras, puentes y viviendas. El objetivo es tener un diagnóstico integral antes del lunes.
Mientras tanto, las lluvias siguen amenazando el sureste del país. Pero desde el aire, los helicópteros continúan volando bajo la consigna de “no dejar a nadie atrás”.
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