El 21 de febrero de 2025, el Departamento de Justicia de Estados Unidos confirmó la extradición de Jesús Ricardo Patrón, conocido como “El H-3” , uno de los narcotraficantes más buscados del Cártel de los Beltrán Leyva. Esta acción resalta la colaboración internacional en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, un paso crucial hacia la justicia en ambos lados de la frontera.
“El H-3” , quien operaba bajo varios alias como “Diabólico” y “James Bond”, fue capturado en febrero de 2019 en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco. Desde entonces, enfrentaba múltiples cargos relacionados con su liderazgo en el grupo H-2, una organización criminal que se dedicaba al tráfico de heroína, cocaína y metanfetaminas entre México y Estados Unidos.
La carrera criminal del H-3: Liderando el cártel H-2
La historia de “El H-3” comienza con su hermano Juan Francisco Patrón, conocido como H-2, quien fundó el grupo H-2 tras la muerte de Héctor Beltrán Leyva en 2014. A raíz de la muerte de su hermano en 2017, Jesús Ricardo asumió el control de la organización, conocida por su brutalidad y su involucramiento en la distribución de drogas a gran escala en Estados Unidos.
El grupo H-2 operaba principalmente en los estados de Nayarit y Sinaloa, aunque también tenía células en ciudades clave de EE. UU. como Los Ángeles, Las Vegas, Ohio, Minnesota, Carolina del Norte y Nueva York. Estas células se encargaban de distribuir miles de kilogramos de droga mensualmente, generando ganancias millonarias que sostenían su operación criminal.
Cargos y consecuencias: ¿Qué enfrenta ‘El H-3’ en EE. UU.?
Durante su audiencia en el tribunal federal de Brooklyn, Nueva York, Jesús Ricardo Patrón fue acusado de liderar una empresa criminal continua dedicada al narcotráfico. Los cargos incluyen tráfico de drogas, uso de armas de fuego y lavado de dinero. Si es declarado culpable de todos los cargos, podría enfrentarse a una sentencia de cadena perpetua.
El fiscal del Distrito Este de Nueva York, John J. Durham, expresó su agradecimiento a las autoridades mexicanas por facilitar la extradición de Patrón. Este tipo de colaboraciones internacionales es fundamental para desmantelar organizaciones criminales como el Cártel de los Beltrán Leyva y otras bandas narcotraficantes que operan a nivel global.
La lucha continua contra el narcotráfico: más allá de la extradición
La extradición de El H-3 es solo un capítulo en la larga batalla contra el narcotráfico, pero marca un avance importante. La colaboración entre México y Estados Unidos es crucial para frenar la distribución de drogas ilegales y el lavado de dinero que financian organizaciones criminales transnacionales.
Cabe recordar que en 2020, otro personaje clave del narcotráfico mexicano, el general Salvador Cienfuegos, fue detenido en Los Ángeles bajo cargos de colaborar con el Cártel H-2, aunque posteriormente los cargos fueron retirados y fue regresado a México. Este contraste refleja las complejidades del enfrentamiento al narcotráfico en ambos países y la importancia de seguir impulsando estrategias de cooperación entre ambas naciones.
¿Qué sigue para el Cártel H-2 y la justicia en EE. UU.?
La extradición de ‘El H-3’ representa una victoria en la lucha contra el narcotráfico, pero el trabajo no termina aquí. Las autoridades estadounidenses y mexicanas continúan desmantelando las redes criminales que siguen operando en ambos países. Es probable que la información obtenida durante el juicio de Patrón revele más detalles sobre la estructura del Cártel de los Beltrán Leyva y otros actores involucrados en el tráfico de drogas.
Mientras tanto, la Administración para el Control de Drogas (DEA) sigue ampliando sus esfuerzos para frenar el flujo de narcóticos y reducir el impacto de las drogas sintéticas como la metanfetamina y el fentanilo que continúan afectando tanto a México como a Estados Unidos.
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