Diabetes tipo 2 continúa en ascenso en Yucatán. Hasta la semana 43 de 2025 —del 1 de enero al 25 de octubre— el estado registró 7 mil 263 nuevos casos, un incremento del 1.6% en comparación con el mismo periodo de 2024. Aunque la cifra parece pequeña, en términos reales significa 115 personas más diagnosticadas en menos de un año.

Las autoridades de salud alertan que el crecimiento sostenido de esta enfermedad crónica está provocando un impacto serio en la calidad de vida, en los servicios médicos y en la mortalidad del estado.

Un diagnóstico cada seis minutos: la magnitud del problema

De acuerdo con la Secretaría de Salud federal (SSA), en Yucatán cada seis minutos una persona recibe un diagnóstico de diabetes. Esto representa 246 nuevos casos diarios, y lo más destacado es que 58 de cada 100 pacientes son mujeres.

El fenómeno no se limita a la diabetes tipo II, aunque esta sea la más común:

• La diabetes tipo I aumentó más del doble, pasando de 29 casos en 2024 a 67 casos en 2025.
• La diabetes tipo II reportó 4 mil 241 mujeres y 3 mil 022 hombres, lo que confirma que la enfermedad afecta de manera más notable al sector femenino.

En total, sumando diabetes tipo I y II, 7 mil 330 yucatecos han recibido el diagnóstico en los primeros 298 días del año, un incremento del 2.1% frente a los 7 mil 177 registrados en 2024.

Diabetes tipo 2: Una enfermedad que también aumenta la mortalidad

Además del aumento de casos, preocupa el incremento en las defunciones relacionadas con diabetes.

De 2010 a 2024, en Yucatán murieron 1,806 personas por complicaciones de esta enfermedad:

• 793 hombres
• 1,013 mujeres

Tan solo en 2024 la mortalidad aumentó un 24%, según datos del Inegi, lo que coloca a Yucatán como el puesto 19 a nivel nacional en mortalidad por diabetes —subiendo desde el lugar 25— y como la segunda tasa más alta de la Península, después de Campeche.

Factores detrás del incremento: dieta, sedentarismo y genética

La Secretaría de Salud de Yucatán (SSY) identifica varias causas que explican el aumento:

1. Dietas altas en calorías y bajas en fibra

El consumo frecuente de alimentos procesados, bebidas azucaradas y porciones elevadas incrementa el riesgo de desarrollar diabetes tipo II.

2. Sedentarismo

La falta de actividad física sigue siendo uno de los factores más determinantes para la aparición de obesidad y resistencia a la insulina.

3. Obesidad y sobrepeso

Yucatán mantiene uno de los índices más altos del país en estas condiciones, que son antesala directa de la diabetes.

4. Factores genéticos y poblaciones de riesgo

En grupos indígenas y comunidades con procesos de aculturación, el cambio hacia dietas más industrializadas y menor actividad física ha elevado el riesgo de manera pronunciada.

Respuesta oficial: atención multidisciplinaria y unidades especializadas

El Gobierno del Estado recordó que los Centros de Salud atienden actualmente a más de 14 mil personas con diabetes, de las cuales cerca de 2 mil requieren atención especializada en las Unidades de Especialidades Médicas de Enfermedades Crónicas (Uneme EC) ubicadas en Mérida, Valladolid y Ticul.

Estas unidades trabajan bajo un modelo integral que incluye:

• Atención médica continua
• Orientación nutricional
• Apoyo psicológico
• Activación física supervisada
• Acompañamiento de trabajo social

Esto permite mejorar la adherencia al tratamiento y prevenir complicaciones como neuropatías, daño renal o pérdida de la visión.

Día Mundial de la Diabetes: un recordatorio urgente

El 14 de noviembre, Día Mundial de la Diabetes, llega este año en un contexto de incremento sostenido de casos en Yucatán. Las autoridades buscan reforzar la prevención, que sigue siendo la herramienta más efectiva para frenar esta enfermedad.

Entre las recomendaciones destacan:

• Mantener una alimentación baja en azúcares y grasas
• Incrementar la actividad física
• Realizar chequeos periódicos
• Evitar la automedicación
• Promover espacios familiares más saludables

El aumento de 7 mil 263 nuevos casos de diabetes tipo II en Yucatán refleja una tendencia preocupante que requiere acción inmediata. La combinación de factores alimentarios, sedentarismo y predisposición genética está elevando el riesgo en toda la población. Aunque existen programas de atención y unidades especializadas, la prevención sigue siendo clave. La diabetes no solo afecta la salud personal, sino también la economía familiar, el sistema sanitario y la calidad de vida en el estado.

Fortalecer la educación en salud, promover estilos de vida activos y garantizar la detección temprana serán los pasos fundamentales para frenar este avance.