Elementos de la Secretaría de Marina (Semar) aseguraron un arsenal de explosivos en Escuinapa, Sinaloa, incluyendo minas terrestres y bombas diseñadas para ser lanzadas desde drones. Este hallazgo revela las tácticas avanzadas del crimen organizado en la región.
Decomiso de explosivos en Escuinapa
En un operativo de seguridad realizado en la comunidad de El Camarón, en el municipio de Escuinapa, Sinaloa, elementos de la Secretaría de Marina (Semar) localizaron y aseguraron 32 explosivos utilizados por el crimen organizado.
Entre el material incautado se encontraron:
- 21 dispositivos explosivos adaptados para drones.
- 10 artefactos tipo mina, diseñados para detonación por contacto.
- Una carga explosiva envuelta en cinta canela.
Dado el riesgo que representaban estos artefactos, el personal especializado de la Marina neutralizó los explosivos en el mismo lugar.
Drones y explosivos: la nueva estrategia del narco en Sinaloa
El uso de drones con explosivos ha sido reportado en varias ocasiones en Sinaloa, especialmente en la guerra territorial entre las facciones criminales Los Chapitos y La Mayiza.
Casos recientes de ataques con drones en Sinaloa
Noviembre de 2024: Habitantes de Eldorado denunciaron ataques con explosivos en el campo pesquero Las Arenitas.
3 de diciembre de 2024: En Culiacán, se registró la explosión de una camioneta. Aunque inicialmente se atribuyó a un incendio en el tanque de gasolina, en el sitio fue localizado un dron con cámara de video, lo que levantó sospechas sobre el uso de vehículos aéreos en ataques criminales.
Enero de 2025: La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y el Ejército Mexicano aseguraron una camioneta blindada en la sindicatura de Costa Rica, en Culiacán. Lo que llamó la atención fue que la unidad tenía instalada una placa metálica en el techo para protección contra ataques aéreos, una táctica que sugiere el temor a ataques con drones.
Blindaje táctico: una estrategia tomada del ejército ruso
El uso de protecciones metálicas contra ataques aéreos no es exclusivo del crimen organizado en México. Según un artículo del periodista Joseph Trevithick, publicado en The War Zone, esta estrategia fue observada por primera vez en tanques rusos en Crimea en 2021.
“Son estructuras metálicas rudimentarias, parecidas a armaduras de laminillas, diseñadas para proporcionar protección contra ataques desde arriba.”
Los cárteles mexicanos parecen haber adoptado esta táctica militar, instalando barreras de metal en sus vehículos blindados para reducir el impacto de explosivos lanzados desde drones.
La amenaza de los drones en la guerra del narcotráfico
El uso de drones con explosivos ha cambiado la dinámica de la violencia en México. Antes, los enfrentamientos entre grupos criminales se limitaban al uso de armas de fuego y vehículos blindados, pero ahora se han incorporado tecnologías avanzadas que antes solo se veían en conflictos internacionales.
La capacidad de los cárteles para modificar drones comerciales y equiparlos con explosivos representa un riesgo grave para la seguridad pública, ya que estos dispositivos pueden ser utilizados para ataques sorpresa sin exponer directamente a los sicarios.
El decomiso de 32 explosivos en Escuinapa, Sinaloa, evidencia la sofisticación del crimen organizado en México. El uso de drones con bombas y minas terrestres marca una nueva era en la guerra del narcotráfico, con tácticas que imitan estrategias de conflictos bélicos internacionales.
La Secretaría de Marina y el Ejército Mexicano continúan realizando operativos en la zona, pero la creciente militarización de los cárteles plantea un desafío sin precedentes para la seguridad nacional.
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