La cirrosis hepática ya se posiciona como la cuarta causa de muerte entre adultos mexicanos, según especialistas del Hospital Civil de Guadalajara, quienes advirtieron que el problema podría agravarse drásticamente en las próximas décadas si no se mejora la detección y el tratamiento oportuno.
Durante el Día de la Concientización sobre el Cáncer de Hígado, los médicos destacaron el crecimiento del hígado graso metabólico, impulsado por el síndrome metabólico, como el nuevo motor de la enfermedad hepática avanzada en México.
El doctor José Antonio Velarde, jefe del Servicio de Gastroenterología del hospital, explicó que el hígado puede permanecer “silencioso” durante 20 a 40 años antes de mostrar síntomas.
Esto provoca que el cáncer de hígado —que afecta a unos 8 mil mexicanos cada año— se detecte generalmente en etapas avanzadas.
Factores de riesgo y prevención
Entre los principales factores de riesgo destacan el consumo crónico de alcohol, la obesidad, la diabetes, el colesterol alto y la hipertensión, todos relacionados con el síndrome metabólico, que afecta a entre 30% y 50% de la población mexicana.
Velarde alertó que el hígado graso metabólico podría convertirse para 2050 en la principal causa de cirrosis y una fuente importante de cáncer hepático.
Además, mencionó la exposición a aflatoxina B1, una toxina presente en alimentos básicos como el maíz y el cacahuate, que representa un riesgo adicional, sobre todo en personas con Hepatitis B.
Urgencia de detección temprana y tratamientos
Los especialistas, entre ellos los doctores Edgar Santino García y Job Lagunes Muñoz, coincidieron en que esperar síntomas equivale a llegar tarde. Recomendaron realizar ultrasonidos cada seis meses y análisis de sangre para detectar alteraciones hepáticas a tiempo.
Lagunes destacó que los tratamientos tempranos pueden incluir cirugías, ablaciones o trasplantes, y que las terapias como la inmunoterapia abren nuevas posibilidades para pacientes con enfermedad avanzada.
“El mensaje más puntual tendría que ser detectar el cáncer de hígado en escenarios más tempranos y modificar los factores de riesgo. Si trabajamos en prevención, salvaremos más vidas”, subrayó.
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