2024: Un año de luces y sombras en derecho y género
El 2024 será recordado como un año de contradicciones en materia de justicia y género. Por un lado, se lograron avances históricos, como la elección de una presidenta en México y la presencia creciente de mujeres en espacios de poder. Por otro, persisten las violencias estructurales, la exclusión de las mujeres en reformas clave y un sistema de justicia que aún deja mucho que desear para garantizar igualdad y seguridad.
Las reformas judiciales: Inclusión o exclusión
Elección de jueces y magistrados: una oportunidad fallida
La elección popular de jueces y magistrados prometía democratizar el sistema de justicia, pero la falta de perspectiva de género y la exclusión de poblaciones históricamente marginadas han convertido este avance en una asignatura pendiente. Las mujeres y personas LGBTIQ+ enfrentan barreras que van más allá de los requisitos formales, profundizando desigualdades en el acceso a cargos públicos.
La criminalización desproporcionada de mujeres vulnerables
Un tema preocupante es el impacto del marco punitivista en mujeres que, debido a condiciones de pobreza y violencia, son incriminadas bajo leyes diseñadas para combatir la delincuencia organizada. Sin un análisis contextual, muchas mujeres son castigadas como «eslabones débiles», perpetuando la injusticia en lugar de abordarla desde sus raíces sociales.
Feminicidios y narrativas mediáticas: ¿Justicia o espectáculo?
La violencia feminicida en el centro de la atención mediática
Este año, casos como el linchamiento en Taxco, tras el feminicidio de una niña de 8 años, reflejaron cómo los medios de comunicación perpetúan narrativas de morbo y crueldad. Estas coberturas, lejos de exigir justicia, convierten el dolor en espectáculo y contribuyen al desinterés social hacia los feminicidios.
La normalización de la violencia en los medios de entretenimiento
La televisión, con programas como La Casa de los Famosos, mostró dinámicas de violencia emocional y feminicida que pasan desapercibidas bajo el disfraz del entretenimiento. Este fenómeno refuerza la necesidad de construir un marco jurídico que no solo sancione la violencia, sino que transforme las representaciones culturales que la perpetúan.
Las abogadas feministas: Guardianas de la justicia con perspectiva de género
En un contexto donde se desmantelan órganos autónomos como el INAI y se promueven reformas judiciales regresivas, las abogadas feministas se han convertido en pilares de resistencia. Inspiradas por figuras como Ángela Davis, estas defensoras no solo luchan contra las injusticias legales, sino que humanizan el derecho al conectar sus casos con las luchas sociales.
Infancias y justicia: La importancia de garantizar derechos desde la base
Casos como el de Esmeralda en Querétaro evidencian la necesidad de diseñar herramientas que permitan a niñas, niños y adolescentes acceder a la justicia de manera equitativa. Proveer educación legal y fortalecer su capacidad para comprender y ejercer sus derechos es un imperativo ético y jurídico que no puede seguir postergándose.
¿Qué sigue para el derecho y el género en 2025?
El 2024 dejó claro que el derecho no solo refleja las estructuras sociales, sino que también puede ser un agente transformador. El reto de cara al 2025 será construir un marco normativo que no solo proteja, sino que empodere a las mujeres, las infancias y las poblaciones vulnerables.
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