Washington vuelve a ser el epicentro de un viejo debate: ¿quién se beneficia realmente de las decisiones presidenciales? Desde que Donald Trump regresó a la Casa Blanca, las diez personas más ricas de Estados Unidos han visto cómo sus fortunas aumentaban en 700 mil millones de dólares.
Un informe reciente de Oxfam América advierte que el nuevo gobierno ha provocado una de las mayores transferencias de riqueza hacia arriba en décadas, intensificando la brecha entre los ultrarricos y las familias trabajadoras.
La Ley de Reforma Tributaria: el punto de inflexión
La pieza clave de esta nueva era económica es la Ley de Reforma Tributaria, promovida por Trump en su segundo mandato.
Esta legislación redujo drásticamente los impuestos a corporaciones y multimillonarios, mientras se proyectan aumentos para los hogares de bajos ingresos.
De acuerdo con Oxfam, el 1% más rico acumuló 987 veces más riqueza que el 20% más pobre durante el último año.
La desigualdad en cifras
Mientras las fortunas de Elon Musk, Jeff Bezos, Mark Zuckerberg y otros magnates se disparan, el 40% de los estadounidenses vive con menos del doble del umbral federal de pobreza.
En palabras de Abby Maxman, directora de Oxfam América, “la nueva oligarquía estadounidense ya está aquí”.
La organización sostiene que las megacorporaciones prosperan, mientras millones luchan para pagar vivienda, atención médica y alimentos.
Elizabeth Warren y el llamado a una reforma fiscal justa
La senadora demócrata Elizabeth Warren —una de las voces más críticas del sistema— afirma que el informe confirma lo que lleva años denunciando:
“Los más ricos entre nosotros han generado fortunas inimaginables sin pagar prácticamente nada en impuestos.”
Warren insiste en que reformar el sistema tributario, desmantelar monopolios e invertir en servicios públicos no solo ayudaría a las familias, sino que fortalecería la economía estadounidense a largo plazo.
Trump y sus aliados multimillonarios
Durante su investidura, Trump estuvo rodeado de figuras del poder corporativo global: Musk, Bezos, Shou Zi Chew (TikTok) y directivos de Palantir, OpenAI, Google y Lockheed Martin.
Estas empresas han sido piezas clave en su proyecto de innovación tecnológica de 300 millones de dólares, financiado incluso durante el cierre gubernamental.
Además, diversos reportes señalan que la familia Trump habría amasado 3.400 millones de dólares en sus dos mandatos, gracias a inversiones en criptomonedas, la marca MAGA y propiedades de lujo como Mar-a-Lago.
En una rueda de prensa, el propio presidente presumió los logros financieros de sus aliados:
“¡Ganó 2.500 millones, y ganó 900 millones! ¡Eso no está nada mal!”, exclamó entre risas desde el Despacho Oval.
Una nación dividida entre riqueza y necesidad
Mientras los multimillonarios baten récords, millones de ciudadanos enfrentan inseguridad alimentaria y falta de acceso a servicios básicos.
Para Oxfam y economistas progresistas, la prioridad es revertir el modelo fiscal que concentra el poder económico en una élite que influye directamente en las políticas públicas.
El futuro inmediato de Estados Unidos dependerá de si el Congreso y la ciudadanía exigen una redistribución más justa, o si la brecha entre ricos y pobres se convierte en la nueva norma.


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