En una rueda de prensa previa a su viaje a Escocia, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a estar en el centro del huracán mediático al afirmar que Hamas no desea llegar a un acuerdo de alto al fuego con Israel. «Creo que quieren morir», dijo tajante, generando reacciones inmediatas en el plano internacional.
Estas palabras se dieron en el contexto de las negociaciones fallidas por la liberación de los últimos rehenes israelíes retenidos en Gaza. Trump sugirió que Hamas busca evitar un acuerdo justamente porque sabe lo que vendrá tras liberar a los cautivos: “básicamente por eso no quieren llegar a un acuerdo”, declaró.
Críticas a Macron y al reconocimiento de Palestina
El exmandatario también arremetió contra el presidente francés, Emmanuel Macron, por su decisión de reconocer a Palestina como Estado ante la ONU. “Es muy buen tipo, me gusta, pero esa declaración no tiene peso”, comentó Trump, subestimando la postura europea y dejando clara la postura unilateralista de su política exterior.
Estas declaraciones se dan en un momento clave para la región, cuando países europeos buscan presionar a Israel e impulsar una solución de dos Estados. Pero Trump, fiel a su estilo, descartó cualquier validez en esa iniciativa.
Netanyahu respalda la postura estadounidense
En paralelo, Benjamin Netanyahu, primer ministro de Israel, respaldó el mensaje de Trump: “Hamas es el obstáculo para un acuerdo de liberación de los rehenes”. Agregó que Israel, en coordinación con EE.UU., ya evalúa “otras opciones” para erradicar al grupo terrorista y garantizar una paz duradera.
Las palabras de Trump no son solo una opinión: revelan una alianza geopolítica activa con Israel y una línea dura contra el extremismo islamista.
Aranceles a Europa: otra amenaza comercial
Además de su postura sobre Gaza, Trump lanzó otra advertencia al bloque europeo: si no hay acuerdo comercial antes del 1 de agosto, habrá nuevos aranceles del 30% a las importaciones, especialmente de automóviles.
“Tenemos un 50/50 de posibilidades de llegar a un acuerdo”, dijo Trump. La Unión Europea, por su parte, respondió con un documento oficial que detalla contramedidas valoradas en 93,000 millones de euros.
Este incluye represalias a productos estadounidenses como el acero, el aluminio y los autos, con medidas que escalarían hasta 2026 si no se alcanza un pacto. La guerra comercial que Trump reactivó amenaza con impactar no solo al comercio bilateral, sino al equilibrio global.
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