Durante una inspección rutinaria en la frontera entre México y Estados Unidos, especialistas en agricultura de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) detectaron un insecto no identificado en un embarque de radicchio proveniente de Sonora. Tras ser analizado por el Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal (APHIS) del Departamento de Agricultura (USDA), se confirmó que se trataba de Osbornellus salsus, una especie nunca antes registrada en territorio estadounidense.
El hallazgo, considerado inusual, encendió las alertas fitosanitarias por el riesgo que implica la posible introducción de una plaga exótica en los ecosistemas agrícolas del país. Los cicadélidos, grupo al que pertenece esta especie, son insectos que se alimentan de la savia de plantas, árboles y arbustos, y en algunos casos pueden transmitir enfermedades vegetales de alto impacto económico.
Refuerzan medidas fitosanitarias en la frontera
Tras la identificación, las autoridades estadounidenses procedieron a retener y devolver el cargamento a México como medida preventiva. El CBP y el USDA reforzaron los controles de inspección en la frontera con el objetivo de evitar la propagación de especies invasoras que puedan amenazar la producción local.
Guadalupe Ramírez, directora de Operaciones de Campo de la Oficina de Tucson, destacó la labor de los especialistas agrícolas y la cooperación entre agencias: “Nuestros equipos están altamente capacitados para detectar plagas dañinas y proteger los recursos agrícolas del país”.
La detección de Osbornellus salsus subraya la importancia del control fronterizo ante el creciente intercambio comercial agrícola entre México y Estados Unidos.
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