Un reto que nunca desapareció
Lo que comenzó en 2020 como un reto viral en TikTok, el llamado Benadryl Challenge, sigue poniendo en riesgo a adolescentes y jóvenes años después de su aparición. Aunque las redes sociales cambian con rapidez, este desafío, que invita a consumir altas dosis de un antihistamínico de venta libre, ha demostrado que el eco de las tendencias digitales puede durar más de lo esperado.
La difenhidramina, principio activo del Benadryl, provoca somnolencia, alucinaciones y sensación de intoxicación en grandes cantidades. Pero lo que para algunos parece un juego, en realidad puede convertirse en una trampa mortal con consecuencias irreversibles.
La historia detrás de la tendencia peligrosa
En mayo de 2020, se registró la primera hospitalización relacionada con el reto, y pronto la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) lanzó una advertencia urgente. Sin embargo, el desafío continuó propagándose, y hasta 2024 los investigadores documentaron múltiples repuntes en su práctica.
Las cifras son alarmantes: entre 2013 y 2024, se recopilaron 413 reportes de intoxicaciones por difenhidramina en personas de entre 10 y 25 años, con picos especialmente elevados en 2020 y 2023.
Testimonios que revelan el impacto
El peligro no es abstracto: familias enteras han vivido el drama de este reto. En Carolina del Sur, una adolescente de 13 años sufrió un colapso tras ingerir varias pastillas en un intento de drogarse. Su corazón alcanzó casi 200 latidos por minuto, y las alucinaciones la dejaron al borde del colapso.
La madre de la joven, al revisar el historial de TikTok de su hija, descubrió videos de otros adolescentes participando en el reto. Su sorpresa fue inmediata: “Pensé que era un medicamento seguro. No es algo en lo que un adolescente se metería”, confesó con angustia.
En Ohio, la tragedia alcanzó su punto más devastador en abril de 2023, cuando Jacob Stevens, de 13 años, murió tras una sobredosis durante el reto. Estuvo una semana en coma conectado a un ventilador antes de perder la vida.
El patrón invisible de las redes sociales
Los investigadores que analizaron los datos del Sistema de Notificación de Eventos Adversos de la FDA identificaron un patrón preocupante: los casos aumentaban de manera intermitente, resurgiendo en fechas clave como julio de 2020, febrero de 2023 o junio de 2024. Esto refleja cómo los retos virales no desaparecen, sino que se reactivan una y otra vez.
La Dra. Noelia Swymeler, una de las investigadoras del estudio, lo explicó con claridad: “El hecho de que sigamos viendo picos en el uso nocivo de difenhidramina años después de que el desafío se volviera viral por primera vez muestra cuán poderosas y peligrosas pueden ser las tendencias de las redes sociales”.
La urgencia de educar y prevenir
La facilidad con la que adolescentes acceden a medicamentos comunes en el hogar plantea un reto enorme a padres, cuidadores y educadores. Mantener los fármacos fuera de su alcance, hablar abiertamente sobre los riesgos de los retos virales y fomentar el pensamiento crítico sobre lo que circula en redes sociales son medidas fundamentales para evitar nuevas tragedias.
El estudio presentado en la reunión de la Academia Estadounidense de Pediatría en Denver refuerza el llamado a la acción: la prevención y la educación son las herramientas más poderosas para contrarrestar los efectos de un reto que sigue vigente en la vida digital de los jóvenes.
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