El fenómeno de Netflix, KPop Demon Hunters, ha conquistado a millones desde su estreno, pero los fanáticos no deben esperar un remake live action de la historia. Maggie Kang, creadora de la serie, y Chris Appelhans, codirector, han dejado claro que la esencia del proyecto reside en la animación, y trasladarla a acción real podría perder la magia que la caracteriza.

“Hay tantos elementos del tono y la comedia que son ideales para la animación”, declaró Kang a la BBC. “Es realmente difícil imaginar a estos personajes en un mundo live action. Sería demasiado realista y no funcionaría para nada”.

La magia imposible de replicar en acción real

Appelhans coincidió, señalando que uno de los mayores encantos de la animación es la libertad creativa que ofrece. “Rumi puede ser una comediante boba, cantar y dar una patada giratoria hacia atrás un segundo después, y luego caer en picado por el cielo”, explicó. Para los directores, trasladar estas escenas a acción real implicaría perder la espontaneidad y el humor que definen al universo de KPop Demon Hunters (KPDCU).

Ambos coincidieron en que la animación permite explorar composiciones y movimientos imposibles de lograr en live action, y que muchos intentos de adaptación de animes terminan siendo forzados o sobrecargados de efectos visuales.

Futuro del Universo Cinematográfico de KPop Demon Hunters

Respecto al futuro del KPDCU, Kang indicó que no hay anuncios oficiales, pero que definitivamente existe la intención de continuar desarrollando historias en este mundo. “Definitivamente podemos hacer más con estos personajes, y sea lo que sea, será una historia que merece una secuela”, señaló la creadora.

La decisión de mantener la historia en animación es notable, considerando la tendencia de estudios como Disney de realizar remakes live action de sus películas animadas más populares. Kang y Appelhans comprenden que hay un nivel de fantasía y encanto que simplemente no puede replicarse en acción real sin perder autenticidad.

Reconocimiento y perspectivas en premios

El filme también ha generado expectativas en la temporada de premios, con posibilidades de nominaciones a Mejor Película de Animación y Mejor Canción Original. Kang destacó que más allá de los galardones, la verdadera recompensa es la conexión que la audiencia ha mostrado con la serie. “Todos los premios serían geniales, pero sentimos realmente increíbles por lo que la película ya ha logrado. En cierto modo, sentimos que hemos ganado”, afirmó.

El valor de la animación frente a la acción real

La decisión de no realizar un live action refuerza la importancia de la animación como medio narrativo. A diferencia de la acción real, donde los efectos especiales y CGI buscan recrear lo imposible, la animación permite exceder los límites de la imaginación sin restricciones físicas, logrando que personajes y escenas fantásticas cobren vida de manera natural y divertida.

Con esta elección, Kang y Appelhans preservan la esencia de KPop Demon Hunters, asegurando que la historia mantenga su estilo único, su humor distintivo y la libertad creativa que ha hecho que la serie sea un éxito internacional.

En conclusión, aunque los fanáticos podrían desear un live action, la verdadera magia de KPop Demon Hunters se mantiene intacta en la animación, garantizando que futuras historias continúen sorprendiendo y encantando a la audiencia de Netflix.