martes, diciembre 9, 2025

¿Qué elementos componen una instalación solar fotovoltaica?

Una instalación solar fotovoltaica es un sistema perfectamente coordinado, en el que cada componente cumple una función esencial

En el momento de llevar a cabo una instalación solar fotovoltaica lo primero en lo que hay que fijarse es en los componentes necesarios. Esto abarca desde el número de paneles solares para que la instalación cumpla con las necesidades energéticas, hasta la elección del tipo de inversor correcto, las estructuras para placas o las baterías solares —si es que resultan necesarias—, entre otras. Los expertos en materia solar explican cuáles son los componentes que forman parte de una instalación solar y cómo escogerlos.

Una instalación solar fotovoltaica no es solo un conjunto de paneles, es un sistema perfectamente coordinado, en el que cada componente cumple una función esencial. Todos estos elementos deben estar bien dimensionados y correctamente instalados, desde las placas que captan la energía hasta las baterías que la almacenan, pasando por el inversor, las estructuras o el cableado. Además, pueden presentarse en formato de kits o ser adquiridos de manera individual, generalmente para la ampliación o renovación de instalaciones. La tienda online especializada en material fotovoltaico, Cuenca Solar, ofrece ambas soluciones facilitando a los usuarios la posibilidad de escoger entre una gran variedad de kits o componentes individuales de las mejores marcas. A ello se suma su servicio de instalación adicional en toda la Comunidad de Madrid y Castilla La-Mancha.

La energía solar, bien planificada y mantenida, sigue siendo una de las mejores inversiones en sostenibilidad y ahorro energético disponibles hoy en día. Si se cuenta con un buen asesoramiento de expertos y se dimensiona correctamente la instalación, esta garantizará un mayor rendimiento energético, seguridad, durabilidad y rentabilidad.

Paneles solares: el corazón de la instalación

Los paneles solares fotovoltaicos son el elemento más visible y esencial de una instalación solar. Su función es captar la radiación del sol y transformarla en energía eléctrica mediante el efecto fotovoltaico. Estos están formados por células de silicio, un material semiconductor que libera electrones cuando recibe luz solar, generando corriente continua (CC). Además, existen diferentes tipos, aunque los más comunes son los monocristalinos y los policristalinos, resaltan los expertos. Los primeros ofrecen una mayor eficiencia y un diseño más uniforme, mientras que los segundos son algo más económicos y funcionan bien en zonas con alta radiación. En el momento de elegir el número y tipo de paneles, continúan, deben tenerse en cuenta factores como la ubicación geográfica, la orientación e inclinación del tejado, el espacio disponible y, por supuesto, el consumo energético del inmueble. En zonas como el centro o sur de España, donde la irradiación solar es alta, una menor cantidad de paneles puede cubrir gran parte del consumo anual.

El inversor solar: convierte y controla la energía

El inversor solar es considerado el cerebro de la instalación, aclaran desde el sector. Su función principal es convertir la corriente continua (CC) generada por los paneles en corriente alterna (CA), que es la que emplean los electrodomésticos y sistemas eléctricos de una vivienda o empresa. Ahora bien, estos pueden ser de varios tipos, cada uno con características específicas. Es el caso de los inversores de cadena (string), que conectan varios paneles en serie, generalmente usados para instalaciones domésticas simples, y que además pueden verter la energía sobrante a la red o no verter los excedentes. También se encuentran los inversores híbridos, que combinan la conversión de energía con la gestión de baterías, permitiendo el autoconsumo y el almacenamiento simultáneo. O los microinversores, que están presentes en cada panel y permite un control más preciso, así como una producción más estable —especialmente si hay sombras parciales—. Y, por último, se encuentran los inversores trifásicos, empleados en instalaciones de mayor potencia, como viviendas grandes, negocios o naves industriales.

Además de convertir la energía, el inversor también monitoriza el funcionamiento del sistema, detecta posibles fallos y registra la producción en tiempo real. Elegir un inversor de calidad y compatible con los demás componentes es fundamental para garantizar el rendimiento global de la instalación, enfatizan los profesionales del sector.

Las baterías solares: almacenamiento y autonomía energética

Las baterías solares permiten almacenar la energía generada durante el día para utilizarla por la noche o en momentos de baja producción. No son imprescindibles en todos los sistemas, pero sí muy recomendables cuando se busca mayor independencia de la red eléctrica o en instalaciones aisladas, donde no hay conexión a la red. Los modelos más utilizados actualmente son las baterías de litio, como las Pylontech. Aunque también existen opciones más económicas de plomo-ácido, las estacionarias o las AGM. Es fundamental tener en cuenta el tamaño o capacidad de las baterías para dimensionar la instalación, así como su funcionamiento o tipo concreto de batería.

Estructuras y soportes: estabilidad y orientación óptima

Las estructuras para paneles solares garantizan una instalación segura y eficiente, ya que favorecen la inclinación y orientación correcta del sistema. Su diseño influye directamente en la cantidad de energía que los paneles pueden generar. Estos, explican los profesionales, también pueden ser de varios tipos, como las estructuras coplanares, las inclinadas o las estructuras para suelo (o pérgolas). Una correcta orientación, preferiblemente al sur y con una inclinación de entre 25º y 35º en la península ibérica puede incrementar la eficiencia de la instalación hasta un 20%.

Cableado y protecciones eléctricas

Aunque suelen pasar desapercibidos, el cableado y los sistemas de protección eléctrica son esenciales para la seguridad y el rendimiento de una instalación solar. El cableado conecta los paneles entre sí y con el inversor, transportando la corriente generada. Además, toda instalación debe incluir protecciones eléctricas que eviten sobrecargas, cortocircuitos y sobretensiones, como fusibles y seccionadores, interruptores magnetotérmicos o pararrayos. Estas medidas no solo protegen los equipos, sino también la seguridad de las personas que interactúan con la instalación.

Sistema de monitorización: control y eficiencia en tiempo real

Los sistemas fotovoltaicos modernos incorporan dispositivos o aplicaciones de monitorización, que permiten seguir el rendimiento de la instalación en tiempo real. Generalmente, desde el propio inversor o mediante una app móvil.

Elementos opcionales: optimizadores y reguladores de carga

En algunas instalaciones se incluyen optimizadores de potencia, pequeños dispositivos que se colocan en cada panel para mejorar su rendimiento individual. Son muy útiles cuando hay sombras parciales o paneles orientados en diferentes direcciones. También existen los reguladores de carga, que controlan la energía que pasa de los paneles a las baterías, evitando sobrecargas y alargando su vida útil. En los kits más avanzados, esta función ya viene integrada en el inversor híbrido.

Giovanna Cancino
Giovanna Cancino
Giovanna Cancino es una experimentada profesional de la comunicación, Licenciada en Ciencias y Técnicas de la Comunicación. Con más de una década de trayectoria en medios impresos y digitales, se ha consolidado como reportera y editora. Su profundo conocimiento se refleja en sus colaboraciones en la sección deportiva 'Sport Judge', así como en las importantes secciones Nacional e Internacional, asegurando una cobertura fiable y relevante para nuestros lectores.
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