Muchas personas que están por pensionarse con el Instinto Mexicano del Seguro Social (IMSS) bajo la Ley 73 y tienen un salario muy bajo, se enfrentan a recibir únicamente la pensión mínima garantizada.
Sin embargo, expertos en pensiones han revelado un “truco” sencillo que puede ayudar a mejorar un poco el monto mensual, trata de: iniciar el trámite en febrero y no en otro mes.
¿Por qué pensionarse en febrero es más conveniente en el IMSS?
De acuerdo con asesores de pensiones, este truco funciona porque el salario mínimo, con el que se calcula la pensión mínima garantizada, se actualiza cada año por inflación en enero, pero entra en vigor en febrero.
Si una persona se pensiona en diciembre, no verá reflejado el ajuste en su pensión. En cambio, si espera hasta febrero, su pensión mínima se calcula con el salario ya actualizado
Así, aunque el aumento no es significativo en todos los casos, sí representa una mejora automática sin necesidad de hacer trámites adicionales.
¿Quiénes pueden acceder a la pensión mínima garantizada en la Ley 73?
La pensión mínima garantizada aplica para quienes no logran alcanzar un cálculo mayor por su salario o semanas cotizadas, pero el Estado asegura que reciban al menos un ingreso base. Los requisitos son:
- Haber cotizado bajo la Ley 73 del IMSS (antes del 1 de julio de 1997).
- Tener entre 60 y 65 años de edad al momento de solicitar la pensión.
- Contar con al menos 500 semanas cotizadas.
Este esquema busca proteger a los trabajadores con ingresos bajos para que tengan un ingreso vitalicio en su retiro.
¿Qué recomiendan los expertos?
Especialistas como Proyecsar explican que el mejor mes para iniciar el trámite de pensión mínima garantizada es febrero, ya que ahí se asegura el cálculo con el salario mínimo actualizado.
Con esta estrategia, quienes se pensionen bajo la Ley 73 del IMSS pueden obtener un monto ligeramente mayor, lo que resulta relevante para mejorar el ingreso mensual de la pensión.
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