México llega con grandes expectativas al Mundial Sub-17 2025, que se llevará a cabo en Qatar del 3 al 27 de noviembre, y desde ya se perfila como una de las selecciones protagonistas. Aldo de Nigris, delantero de Monterrey, expresó que el objetivo es claro: ir por el campeonato y demostrar que México sigue siendo una potencia en esta categoría.

Una historia de éxitos y desafíos en la Sub-17

Desde la Copa Mundial Sub-17 2005 en Perú y la edición de 2011 en México, el Tri juvenil ha generado grandes expectativas. Sin embargo, menos de la mitad de los jugadores que ganaron aquellos torneos lograron consolidar carreras largas en el circuito profesional. Muchos enfrentaron lesiones, problemas económicos o simplemente no continuaron en el futbol de alto nivel.

Actualmente, la generación dirigida por Carlos Cariño está conformada por jóvenes que apenas tenían tres años cuando Antonio Briseño y Giovani Casillas marcaron los goles que le dieron a México el título en 2011. A pesar de los desafíos históricos, esta nueva camada promete ser agresiva y competitiva.

Formato ampliado y rivales de grupo

El Mundial Sub-17 2025 será histórico, pues contará por primera vez con 48 naciones, en lugar de las 24 tradicionales. México abrirá su participación en el Grupo F enfrentando a Corea del Sur el 4 de noviembre, luego a Costa de Marfil el 7 y cerrará la fase contra Suiza el 10 del mismo mes.

El Tricolor clasificó al torneo al lograr el título de Concacaf en febrero de 2023, tras vencer a Estados Unidos 3-1. Esto consolida la ilusión del equipo y la expectativa de los aficionados en todo el país.

Plantel con legado futbolístico

El plantel de México Sub-17 combina talento emergente con herencia futbolística, incluyendo jugadores que continúan el legado de sus padres:

• Lucca Vuoso, hijo de Vicente Matías Vuoso.
• Aldo De Nigris, hijo del exjugador de Rayados.
• Máximo Reyes, primogénito de Joaquín Reyes.
• Abdon Turrubiates, heredero del ex portero Emmanuel Turrubiates.

Carlos Cariño destacó que estos jóvenes conocen la exigencia de la selección y están preparados para enfrentar los retos del torneo. Además, varios de ellos han destacado en sus respectivos clubes y ligas juveniles, consolidando su participación en el proceso mundialista.

Preparación y mentalidad ganadora

Cariño asegura que la presión siempre está presente en las selecciones juveniles, pero el equipo ha trabajado para ser protagonista y mantener un estilo ofensivo y agresivo. “Vamos a morir en la raya”, afirmó el entrenador, enfatizando la determinación del equipo para competir al máximo nivel.

De Nigris, por su parte, aseguró que la ilusión supera cualquier presión. “Más que sentir presión, el Mundial nos ilusiona. México es una potencia en esta categoría y allá lo vamos a demostrar”, dijo. Su experiencia y liderazgo serán clave para guiar a la nueva generación de talentos en busca del título mundial.

Expectativas para Qatar 2025

El Mundial Sub-17 representa una oportunidad para consolidar el desarrollo de fuerzas básicas en México, así como para demostrar que el país sigue formando jugadores capaces de competir en escenarios internacionales. El torneo también será un escaparate para scouts y clubes que buscan a los futuros talentos del futbol mundial.

Con una generación llena de juventud, talento y legado futbolístico, México se prepara para vivir un torneo intenso y lleno de expectativas, buscando sumar otro capítulo a su historia de éxito en la categoría Sub-17. La meta es clara: demostrar en Qatar que México sigue siendo una potencia del futbol juvenil.