La Semana 6 de la NFL arrancó con una de las mayores sorpresas de la temporada: los Giants de Nueva York derrotaron 34-17 a los Eagles de Filadelfia en el MetLife Stadium. Con una actuación dominante del corredor novato Cam Skattebo, quien anotó tres touchdowns por tierra, los neoyorquinos consiguieron su segunda victoria del año y enviaron un mensaje claro al resto de la conferencia.
Un inicio explosivo en el MetLife Stadium
Los Eagles comenzaron con fuerza. Jake Elliott abrió el marcador con un gol de campo de 42 yardas, pero la respuesta de los Giants no tardó. El mariscal novato Jaxson Dart sorprendió a la defensiva visitante con una escapada de 20 yardas hasta la zona de anotación, que encendió al público y cambió la energía del juego.
El intercambio de puntos continuó en el primer cuarto. Dart conectó un pase de 35 yardas con Wen’Dale Robinson para ampliar la ventaja, aunque fallaron el punto extra. Filadelfia recortó distancias con un envío corto de Jalen Hurts a su ala cerrada Dallas Goedert, demostrando que el partido sería de ida y vuelta.
Polémica en el “tush-push” y respuesta de los Giants
En el segundo cuarto, los Eagles retomaron la delantera con la polémica jugada “tush-push”, en la que Hurts fue impulsado por su línea ofensiva para anotar desde una yarda. La acción generó protestas en el banquillo neoyorquino por un presunto fuera de lugar no marcado.
Pero antes del descanso, los Giants se rehicieron. Cam Skattebo, el joven corredor que había brillado en la pretemporada, consiguió su primera anotación de la noche con un acarreo de cuatro yardas, desatando la euforia entre los aficionados locales.
Skattebo domina la segunda mitad con poder y precisión
La segunda mitad comenzó con ataques trabados, sin que ninguno de los dos equipos lograra avanzar. Sin embargo, en el tercer cuarto, Nueva York volvió a encontrar ritmo. Una serie sostenida de 10 jugadas y 56 yardas culminó con otra anotación de Skattebo, quien demostró potencia y determinación al cruzar la línea de gol con un esfuerzo físico impresionante.
Tanto Jaxson Dart como Skattebo tuvieron que abandonar momentáneamente el campo por evaluaciones de conmoción, lo que provocó la entrada de Russell Wilson. El veterano fue recibido con abucheos por parte del público, que pedía el regreso del novato. Minutos después, ambos titulares regresaron, fortaleciendo el ánimo del equipo.
La intercepción que cambió el rumbo del partido
El momento clave llegó en el último cuarto. Jalen Hurts, quien no había sido interceptado en los últimos 11 partidos, lanzó un pase comprometido en zona roja que fue interceptado por Cordale Flott. El defensivo devolvió el balón 68 yardas hasta la yarda 23 rival, preparando el terreno para el tercer touchdown de Skattebo, que selló el marcador definitivo de 34-17.
Esa anotación no solo significó el cierre del juego, sino también la consolidación de Skattebo como una de las revelaciones más prometedoras del año.
Un triunfo que redefine la confianza de los Giants
Con este resultado, los Giants mejoran su marca a 2-4 y logran una victoria vital que podría cambiar el rumbo de su temporada. Después de un inicio complicado, el equipo encontró equilibrio entre ataque terrestre y defensiva oportuna.
Por su parte, los Eagles caen a 4-2, rompen su racha de tres victorias consecutivas y dejan serias dudas sobre su capacidad para cerrar partidos fuera de casa. El calendario no será sencillo: la próxima semana enfrentan a los Cowboys, un duelo que promete emociones fuertes.
Mientras tanto, Nueva York viajará a Washington para enfrentar a los Commanders, con el objetivo de mantener el impulso y seguir demostrando que pueden competir con cualquiera en la NFC.
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