El panorama de los deportes acuáticos en México sigue enredado. Desde que World Aquatics desconoció a la Federación Mexicana de Natación (FMN), parecía que el proceso de reconfiguración avanzaría, pero la realidad es otra. Las tensiones han escalado, y el consenso para elegir al nuevo presidente o presidenta sigue siendo el principal obstáculo.
Este proceso no solo define el futuro de disciplinas como la natación, los clavados y el waterpolo, sino que también marca el primer roce público entre el nuevo director de la Conade, Rommel Pacheco, y la presidenta del Comité Olímpico Mexicano, María José Alcalá.
Un conflicto que comenzó hace años
La lucha por renovar la FMN no es reciente. Todo comenzó en 2020 cuando se intentó evitar que Kiril Todorov extendiera su mandato por un cuarto periodo al frente de la federación. Esta batalla fue encabezada inicialmente por Miguel Valtierra, entonces presidente de la asociación de natación de Nuevo León, y recibió el apoyo de figuras como Fernando Platas y el expresidente del COM, Carlos Padilla.
Sin embargo, con Ana Guevara al frente de la Conade y respaldando a Todorov, el panorama se estancó. Ahora, con Rommel Pacheco al mando de la Conade, parecía que había un consenso para dejar atrás a Todorov. No obstante, el conflicto no termina ahí.
Rommel Pacheco y la controversia por Eduardo Rueda
Rommel Pacheco tiene a un claro candidato para encabezar la nueva federación: Eduardo Rueda, vicepresidente de clavados. Sin embargo, esta elección ha generado fuertes críticas debido al pasado familiar de Rueda.
Su tío, Francisco Rueda, fue un entrenador de clavados suspendido indefinidamente en 2004 tras acusaciones de abuso sexual hacia una de sus alumnas, Laura Sánchez, quien era menor de edad en ese momento. Años después, Francisco se casó con ella, lo que muchos consideran un intento de disfrazar sus delitos.
Eduardo Rueda, entonces vicepresidente de clavados, estaba al tanto de los actos de su tío y no intervino. Este historial ha desatado polémica, especialmente entre quienes buscan que esta nueva era en los deportes acuáticos sea transparente y libre de corrupción.
La postura de María José Alcalá y el camino hacia una nueva era
Por su parte, María José Alcalá, presidenta del COM, ha apoyado iniciativas para garantizar que los deportes acuáticos en México sean representados por personas con un historial limpio y comprometidas con la integridad. Aunque no ha declarado explícitamente su postura sobre Rueda, su enfoque apunta a evitar figuras controversiales en la nueva federación.
Fernando Platas, medallista olímpico y defensor de la reforma en la FMN, sigue siendo una opción fuerte para liderar este cambio. Su trayectoria y su compromiso con la limpieza en el deporte lo posicionan como un candidato sólido, pero su designación depende del consenso entre las autoridades.
El desafío de crear una federación limpia y transparente
La reconfiguración de la federación mexicana de natación representa una oportunidad única para transformar los deportes acuáticos en México. Sin embargo, las decisiones deben centrarse en construir un futuro libre de conflictos de interés y de sombras del pasado.
Con el reloj avanzando y las tensiones aumentando, la pregunta es: ¿se logrará aprovechar esta oportunidad para crear una federación que verdaderamente represente los intereses de los atletas y promueva la transparencia?
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