Hace más de 100 años, Joseph Pilates creó un sistema de ejercicios para rehabilitar cuerpos debilitados en medio de la guerra. Lo que nació como un método de supervivencia, hoy se convirtió en una práctica integral, técnica y terapéutica que transforma vidas. Y en Argentina, encontró terreno fértil para evolucionar.
Federico Krüger, referente local y organizador del Congreso Internacional de Pilates, afirma que el método en el país se adaptó a la kinesiología, ganando precisión y reconocimiento internacional. Los instructores argentinos no solo dominan el método clásico, también comprenden cómo adaptar cada ejercicio a distintas patologías o necesidades físicas. Esa integración marcó un antes y un después en la práctica nacional.
¿Por qué pilates es más que ejercicio?
Según estudios publicados en Bulletin of Faculty of Physical Therapy y Healthcare, pilates no solo mejora la salud física, sino también regula el estado emocional, previene lesiones y potencia la conciencia corporal.
En un contexto donde el bienestar integral se volvió prioridad, esta práctica cobra más sentido que nunca.
Los 9 beneficios comprobados del pilates
- Fortalece el core
Activa músculos profundos que estabilizan el cuerpo y previenen lesiones. - Corrige la postura
Reduce tensiones y alinea la estructura ósea y muscular. - Aumenta la flexibilidad
Mejora el rango de movimiento sin comprometer la estabilidad. - Desarrolla fuerza funcional
Trabaja grupos musculares de forma conjunta y eficiente. - Mejora la coordinación motora
Afina el control sobre el cuerpo en cada movimiento. - Eleva la conciencia corporal
Ayuda a detectar hábitos posturales ineficientes. - Optimiza la respiración
Usa el diafragma para oxigenar mejor los tejidos y calmar la mente. - Reduce el estrés
Mejora el estado emocional al conectar cuerpo y mente. - Rehabilita lesiones
Se aplica clínicamente en fisioterapia por su bajo impacto y adaptabilidad.
Un estudio publicado en Healthcare mostró que personas que practicaron pilates durante tres meses redujeron significativamente su ansiedad y mejoraron su capacidad de concentración.
Pilates: tendencia global con raíz local
Según ClassPass, en 2024 el pilates fue la clase más reservada en gimnasios a nivel global. En paralelo, las disciplinas de bajo impacto crecieron un 109 %, reflejando un cambio cultural: menos desgaste, más conexión.
En Argentina, el crecimiento es tangible. Clínicas, estudios y gimnasios incorporan pilates no solo por moda, sino por resultados. Se aplica en pacientes con dolor lumbar, mujeres con diabetes tipo 2, adultos mayores o atletas en recuperación.
Un entrenamiento que trasciende edades y objetivos
Lo que hace único al pilates es su versatilidad: cualquier persona puede practicarlo. Desde quienes buscan tonificar el cuerpo hasta quienes necesitan rehabilitar una lesión, la práctica ofrece una hoja de ruta hacia el bienestar total.
Y cuando se realiza con profesionales certificados, sus efectos se potencian. En un mundo donde el estrés y la desconexión son moneda corriente, pilates ofrece un ancla, un regreso al cuerpo como centro de salud y equilibrio.


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