En Coyoacán, un barrio que respira historia y color, Frida Kahlo vuelve a sorprender al mundo. El próximo 25 de septiembre abrirá la Casa Roja, un nuevo museo dedicado a mostrar el lado más íntimo y familiar de la artista mexicana.
A solo unos pasos de la emblemática Casa Azul, donde vivió junto a Diego Rivera, este nuevo espacio busca ofrecer una mirada distinta: la de la niña, la hermana, la mujer que tejió su identidad mucho antes de convertirse en un ícono mundial.
Un hogar convertido en museo
La Casa Roja fue adquirida por los padres de Frida y, más tarde, heredada por su hermana Cristina y su sobrina Isolda. Hoy, gracias a la iniciativa de la Fundación Kahlo, este espacio se convierte en museo con la misión de preservar y compartir recuerdos nunca antes vistos.
Objetos personales inéditos
El público podrá descubrir un costado desconocido de Frida Kahlo a través de:
- Cartas y fotografías de infancia.
- Un bordado hecho por ella a los cinco años.
- Muñecas, joyas y ropa que formaron parte de su vida cotidiana.
- Su primera pintura al óleo, la misma que mostró a Diego Rivera para saber si tenía futuro como artista.
Más allá de sus obras mundialmente famosas, la Casa Roja promete acercarnos a la esencia humana de Frida.
Fundación Kahlo: preservar el legado
La Fundación Kahlo, con sede en Nueva York, jugará un papel clave en la gestión del museo. Además de exhibiciones, planea crear el Premio de Arte Kahlo, que reconocerá a artistas contemporáneos, y un programa de becas llamado Las Ayudas, destinado a impulsar a nuevos talentos.
“Queremos que la Casa Roja muestre no solo la vida de la artista, sino también los valores que defendió: libertad, identidad y la riqueza del arte mexicano”, expresaron los promotores.
Entre la Casa Azul y la Casa Roja
Mientras que la Casa Azul refleja la vida con Diego Rivera y el círculo cultural de la época, la Casa Roja propone un recorrido más íntimo, centrado en la infancia, la familia y la construcción de la identidad de Frida.
Para los visitantes, será una experiencia complementaria: conocer a la mujer detrás de la artista, descubrir la niña que creció en Coyoacán y entender cómo esos primeros años marcaron su obra.
Una artista eterna
Frida Kahlo, nacida en 1907 y fallecida en 1954, sigue siendo una de las pintoras más valoradas en el mercado internacional. Su obra, cargada de símbolos, mitos y emociones, la convirtió en una figura que trasciende fronteras y generaciones.
Ahora, con la apertura de la Casa Roja, su legado se amplía con un espacio que revela no solo su arte, sino también su mundo personal y familiar.
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