El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, confirmó que en el municipio de Badiraguato se han registrado ataques con drones utilizados por grupos del crimen organizado, lo que ha provocado temor y desplazamientos entre los habitantes.
Durante una entrevista el 28 de octubre, Rocha Moya explicó que las autoridades han asegurado varios drones durante operativos recientes en la zona serrana, destacando que estos artefactos son empleados para acciones violentas y vigilancia criminal.
“Se ha dado un fenómeno repentino de desplazamiento y lo hemos estado atendiendo. Hay un operativo allá y se han decomisado muchos drones, en efecto los estaban utilizando, y la gente les tenía miedo”, declaró el mandatario estatal.
Ataques en la casa de la madre de “El Chapo” Guzmán
Los reportes de ataques ocurrieron la noche del 27 de octubre, cuando se informó que uno de los blancos fue la casa de María Consuelo Loera Pérez, madre fallecida de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Este hecho aumentó la tensión en la región, donde la presencia del Cártel de Sinaloa sigue siendo un tema sensible y de alto riesgo para las comunidades rurales.
Drones, cartuchos y explosivos: hallazgos recientes
La Secretaría de Seguridad Pública de Sinaloa (SSP) informó el 6 de octubre sobre el aseguramiento de un campamento en Badiraguato.
En el sitio fueron encontrados siete drones inhabilitados, cargadores, cartuchos, material táctico y sustancias químicas utilizadas para elaborar artefactos explosivos improvisados (IEDs).
El operativo se llevó a cabo por un Grupo Interinstitucional que patrullaba los poblados de San José del Llano, Soyatita y Huixiopa, donde también se localizaron:
- 10 cargadores
- 250 cartuchos
- Material para explosivos
- 27,800 litros de propilenglicol, sustancia usada en la fabricación de artefactos químicos
Desplazamientos y miedo en comunidades serranas
El 9 de octubre, diversas familias de comunidades como Huixiopa, La Tuna, Bacacoragua, La Lapara, El Chorro, La Palma, Potrero de la Vainilla, San José del Barranco y Sabanillas abandonaron sus hogares por temor a enfrentamientos entre grupos del crimen organizado.
El gobernador Rocha Moya aseguró que las familias desplazadas han sido atendidas por las autoridades, aunque reconoció que la violencia en la sierra sinaloense ha aumentado en las últimas semanas.
Estos hechos confirman un patrón creciente de violencia tecnológica, donde los drones se convierten en armas que alteran la paz social y desplazan comunidades enteras.
Análisis y contexto
El uso de drones por parte del crimen organizado no es un fenómeno nuevo en México, pero su intensificación en Sinaloa preocupa por la capacidad táctica que otorga a estos grupos.
El control territorial y el miedo generado a través de tecnología representan una nueva etapa del conflicto armado interno en regiones como Badiraguato.
Especialistas en seguridad señalan que este tipo de ataques buscan intimidar a pobladores, debilitar la presencia del Estado y mantener rutas estratégicas de trasiego en la sierra.La confirmación de ataques con drones en Badiraguato por parte de Rubén Rocha Moya evidencia una nueva modalidad de violencia criminal que afecta directamente a las comunidades serranas.
Mientras continúan los operativos de seguridad, la población exige protección efectiva y retorno seguro, ante un panorama donde la tecnología se convierte en instrumento de miedo.
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