La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo se refirió a la polémica en torno a la diputada federal de Morena, Hilda Brown Figueredo, luego de que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos la vinculara con la facción del Cártel de Sinaloa conocida como “Los Mayos”.
Según Sheinbaum, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) analizó la información, pero hasta ahora no existen pruebas suficientes para confirmar operaciones de lavado de dinero en territorio mexicano.
La postura del gobierno mexicano
“Tuvo conocimiento la UIF algunas semanas antes; (el Tesoro) pidió que pudiera hacerse una investigación en conjunto. De nuestro lado no hay pruebas suficientes como para establecer el lavado de dinero que ellos plantean”, explicó Sheinbaum.
La mandataria aseguró que la decisión de incluir a la legisladora en la lista de sanciones fue tomada por las instituciones estadounidenses, pero México no recibió evidencia sólida que permitiera actuar legalmente.
El papel de la FGR y las investigaciones pendientes
Al ser cuestionada sobre si la diputada puede continuar en funciones, Sheinbaum aclaró que jurídicamente lo que procedería es que la Fiscalía General de la República (FGR) inicie una investigación.
“Si hubiera más información, nosotros no vamos a proteger a nadie”, afirmó la presidenta, dejando claro que el gobierno federal está dispuesto a actuar si se presentan nuevos elementos.
Entre la política y la justicia
Este caso coloca nuevamente en la mira la relación entre política, justicia y cooperación internacional en materia de seguridad. Para Sheinbaum, la prioridad es que México mantenga un proceso basado en pruebas verificables y no en acusaciones sin sustento.El desenlace dependerá de si Estados Unidos comparte evidencia adicional que permita a las autoridades mexicanas dar un paso más allá en la investigación.
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