El regreso de la construcción por administración

La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo anunció que el Estado mexicano y la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) están recuperando la capacidad de realizar obras públicas por administración, es decir, directamente con recursos y trabajadores propios, en lugar de depender totalmente de contratistas privados.

Este cambio se hizo evidente con el arranque del programa de repavimentación en la carretera federal Texcoco-Lechería y Texcoco-Los Reyes, donde se estrenaron los nuevos trenes de repavimentación adquiridos por el gobierno.

Según Sheinbaum, esta estrategia busca aprovechar el talento de los trabajadores de la SICT, reducir costos y garantizar que las obras se realicen con criterios de honestidad, innovación tecnológica y sustentabilidad.

Objetivo: dejar al 100% las carreteras federales

La mandataria explicó que la meta es lograr que, para mediados de 2026, todas las carreteras federales de México estén rehabilitadas. Esto incluye:

• Repavimentación profunda, cuando la base de la carretera está dañada.
• Bacheo y mantenimiento rutinario, en tramos con afectaciones menores.

Sheinbaum destacó que, contrario a la percepción de que la seguridad pública es el mayor problema, las encuestas muestran que la ciudadanía coloca como prioridad el bacheo y la reparación de caminos.

Cómo funcionan los trenes de repavimentación

El titular de la SICT, Jesús Antonio Esteva Medina, detalló que actualmente se trabaja en la intervención de 4,000 kilómetros de carreteras, con un avance del 85% y una inversión de 15,470 millones de pesos.

Los nuevos trenes de repavimentación cuentan con 152 máquinas especializadas, entre ellas:

• 22 fresadoras.
• 28 petrolizadoras.
• 30 rodillos metálicos.
• 30 compactadores neumáticos.
• 30 pavimentadoras.
• 6 recuperadoras.
• 6 rodillos de pata de cabra.

A diferencia de los métodos tradicionales, estas máquinas permiten reparar desde la capa superficial hasta la base de las carreteras, lo que alarga la vida útil de las obras y reduce la necesidad de intervenciones frecuentes.

Cobertura nacional y etapas del programa

En esta primera fase, 10 trenes de repavimentación estarán distribuidos en entidades como el Estado de México, Aguascalientes, Baja California Sur, Campeche, Chihuahua, Colima, Guerrero, Jalisco y Veracruz.

Posteriormente, en octubre, se integrará un segundo bloque que abarcará Oaxaca, Morelos, Michoacán, Zacatecas, Coahuila y Tabasco. El objetivo es que cada estado del país cuente con al menos un tren de repavimentación hacia finales del próximo año.

Un modelo de austeridad, innovación y beneficio social

Sheinbaum subrayó que este plan combina tres ejes fundamentales:

• Austeridad: al reducir costos mediante la compra de maquinaria propia.
• Innovación tecnológica: con equipos capaces de reconstruir las capas profundas del pavimento.
• Beneficio social: garantizando caminos seguros y de mejor calidad para millones de mexicanos.

“Estamos recuperando la capacidad del Estado mexicano para hacer obras con profesionalismo, honestidad y pensando en la gente”, concluyó la presidenta.