El Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) no solo define cuánto y en qué se gastará el dinero público, sino que también es un reflejo de las prioridades del gobierno. Para 2025, el proyecto enviado por la Secretaría de Hacienda ha generado polémica: mientras sectores clave como salud y seguridad enfrentarán recortes, las obras insignia del gobierno recibirán más recursos.
En este contexto, la propuesta de presupuesto alternativo presentada por el Partido Acción Nacional (PAN) busca corregir el rumbo y priorizar temas que afectan directamente la vida de los ciudadanos.
¿Qué es el Presupuesto de Egresos de la Federación?
El PEF es el principal instrumento de política pública en México. Define cómo el Estado mexicano, en todos sus niveles, distribuye los recursos provenientes de los impuestos de los ciudadanos. Este documento establece las prioridades del gobierno y su capacidad para responder a las necesidades sociales.
Sin embargo, las decisiones sobre este presupuesto suelen ser objeto de debate, especialmente cuando los recursos parecen inclinarse hacia proyectos que no necesariamente benefician a la mayoría.
Las polémicas del presupuesto 2025
En el proyecto de presupuesto para 2025, se observa un aumento significativo en los recursos asignados a proyectos como el Tren Maya y la refinería Dos Bocas, pero un recorte alarmante en áreas esenciales como:
- Salud: Reducción que pone en riesgo la atención a pacientes con cáncer, cobertura de vacunación y surtimiento de recetas.
- Seguridad: Menos recursos para equipamiento, patrullas y vigilancia.
- Educación superior: Menores fondos para universidades públicas.
Estos recortes contrastan con las principales preocupaciones de los mexicanos, quienes según encuestas consideran la salud y la seguridad como temas prioritarios.
El presupuesto alternativo del PAN: ¿Una solución viable?
El Partido Acción Nacional propuso un presupuesto alternativo con énfasis en salud, seguridad y educación. Entre sus principales propuestas destacan:
- Salud: Construcción de 40 hospitales de tercer y cuarto nivel, garantía de tratamientos oncológicos y cobertura total del esquema básico de vacunación.
- Seguridad: Más patrullas, elementos mejor equipados y nuevos centros C5 en ciudades con alta incidencia delictiva.
- Educación: Reasignar fondos para universidades y programas educativos.
- Reactivación económica: Apoyos a pequeños negocios y proyectos comunitarios.
- Políticas sociales: Ampliación de estancias infantiles y comedores comunitarios.
El PAN plantea financiar estas propuestas mediante una reducción del 50% al presupuesto de obras como el Tren Maya y la refinería Dos Bocas, así como un recorte en el presupuesto de Pemex, una empresa que, según el partido, ha operado con grandes déficits.
¿De quién es el dinero público?
Es importante recordar que los recursos públicos provienen de los impuestos que pagan los mexicanos. Por ello, su uso debe estar regido por principios de transparencia, eficiencia y racionalidad. Cada peso debe destinarse a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, no a proyectos de dudosa rentabilidad o utilidad.
El presupuesto alternativo del PAN plantea un uso más eficiente y estratégico de los recursos, priorizando áreas que impactan directamente en la vida de las personas.
¿Qué está en juego para 2025?
El debate en torno al PEF 2025 es más que una discusión técnica. Es una pugna sobre qué modelo de país queremos construir: uno que invierta en salud, seguridad y educación, o uno que privilegie obras faraónicas con cuestionamientos técnicos y financieros.
Conclusión: Un llamado a la reflexión
El Presupuesto de Egresos de la Federación no es solo un documento; es la base para el desarrollo de México. En un año electoral, es crucial que los ciudadanos exijan que los recursos se utilicen en áreas que verdaderamente mejoren su calidad de vida. El gobierno tiene la responsabilidad de escuchar, pero también de justificar sus prioridades.
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