Después de perder el registro nacional, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) en el Estado de México se encuentra en su momento más crítico. Lo que alguna vez fue un emblema de la izquierda mexicana ahora lucha por sobrevivir como partido político local. Sin embargo, esta transición está siendo frenada por conflictos internos, escándalos y una desconexión total con la ciudadanía.
Liderazgos enfrentados: el conflicto entre Barrera y Ortega
En el centro del caos están dos figuras principales:
- Agustín Barrera Soriano, actual dirigente estatal, aferrado al control del partido.
- Omar Ortega Álvarez, diputado local que asegura tener mayoría de consejeros a su favor y exige el liderazgo.
Si ambos líderes no logran un acuerdo, el PRD podría perder las prerrogativas y el reconocimiento oficial como partido local, sellando su desaparición.
El caso Huicho: un escándalo que define al PRD
Uno de los ejemplos más claros del desmoronamiento del PRD es el caso de Pedro Luis Hernández de Paz, alcalde de Santo Tomás. En un evento que parecía una parodia política, Hernández, conocido como «Huicho«, tuvo que huir en medio de empujones y gritos para evitar ser detenido, mientras sostenía un amparo.
Con acusaciones de nexos con el crimen organizado y secuestro, tanto él como su esposa, la también alcaldesa María del Rosario Matías, permanecen desaparecidos. Este caso ha puesto en evidencia la crisis de liderazgo y ética en el PRD estatal, dejando en el abandono a municipios clave.
Municipios bajo el control del PRD: ¿salvavidas o lastre?
El PRD ha logrado mantener control en cinco municipios mexiquenses: Ayapango, Cocotitlán, Texcaltitlán, Mexicaltzingo y Santo Tomás. Sin embargo, lejos de ser un logro, estos municipios enfrentan caos administrativo y falta de resultados.
Los escándalos en Santo Tomás, encabezados por Hernández de Paz, ejemplifican la falta de gobernabilidad que ha caracterizado a estas administraciones, dejando a los ciudadanos en una situación de incertidumbre.
Obras fantasma y opacidad en Toluca
En la capital mexiquense, la administración de Juan Maccise Naime cierra con señalamientos graves. El director de Desarrollo Urbano, Patricio Jiménez Gutiérrez, es acusado de realizar pagos adelantados a empresas por obras que ni siquiera comenzaron, como las de Ingeniería Estructural Habitual y Constructora RESAVAL.
Además, 100 millones de pesos del Fondo de Infraestructura Social Municipal quedaron sin ejercer, afectando directamente a los ciudadanos que esperaban mejoras en su calidad de vida.
¿Qué sigue para el PRD en Edomex?
El panorama es desalentador. Si Agustín Barrera y Omar Ortega no logran resolver su conflicto interno, el PRD podría desaparecer del mapa político en el Estado de México.
Sin liderazgos sólidos ni un plan claro para reconectar con la ciudadanía, el partido enfrenta un futuro incierto, marcado por el desgaste, los escándalos y la desconfianza pública.
Un llamado a la reflexión
El PRD en el Estado de México debe mirar hacia adentro y replantear su rumbo si quiere sobrevivir. Reconstruir la confianza ciudadana, fortalecer su estructura interna y dejar de lado los intereses personales son pasos esenciales.
Sin embargo, si no actúan pronto, el partido que alguna vez iluminó la izquierda mexicana se enfrentará al mismo destino que su símbolo en Santo Tomás: sillas volando y un escape por la puerta trasera.
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