El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha promulgado una nueva doctrina nuclear que redefine las condiciones bajo las cuales el país podría usar armas atómicas. Esta actualización amplía los parámetros de respuesta, incluyendo escenarios de ataque convencional que amenacen la soberanía de Rusia y Bielorrusia.
¿Qué implica la nueva doctrina nuclear de Rusia?
El documento, que reemplaza la versión de 2020, establece que una agresión convencional que amenace gravemente la soberanía o integridad territorial de la Unión Estatal Rusia-Bielorrusia podría justificar el uso de armas nucleares. Además, se considera un «ataque conjunto» cualquier agresión respaldada por una potencia nuclear, incluso si esta no participa directamente.
Entre los nuevos escenarios contemplados, destacan:
- Ataques masivos con aviones, drones y misiles enemigos.
- Agresiones respaldadas por alianzas militares como la OTAN.
- Ejercicios militares cercanos a las fronteras rusas.
- Bloqueos que afecten el acceso a vías de comunicación vitales.
¿Por qué Rusia ajusta su estrategia nuclear ahora?
La promulgación de esta doctrina coincide con los 1,000 días de conflicto en Ucrania y busca disuadir a la OTAN de apoyar a Kiev con armamento de largo alcance. Según Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, los cambios responden a «la necesidad de proteger la seguridad nacional frente a las crecientes amenazas externas».
Además, este anuncio se da en un contexto de tensiones con Occidente, donde Rusia percibe un avance constante de las infraestructuras militares de la OTAN hacia sus fronteras.
¿Qué armas contempla la nueva doctrina?
La doctrina no solo refuerza el papel de las armas nucleares estratégicas, sino que también incorpora:
- Armas nucleares tácticas: desplegadas en Bielorrusia desde el inicio de la guerra.
- Nuevos sistemas defensivos: como respuesta a drones y tecnología hipersónica enemiga.
Aunque el documento enfatiza que las armas nucleares son un instrumento de disuasión defensiva, analistas consideran que la rebaja en el umbral para su uso podría escalar las tensiones globales.
Implicaciones globales: advertencia a la OTAN y EE. UU.
Al ampliar los escenarios para el uso de armas nucleares, Rusia envía una señal clara a la OTAN y Estados Unidos. Según expertos, estas medidas buscan desincentivar la integración de nuevos miembros en alianzas militares y limitar la planificación de ejercicios conjuntos en regiones sensibles como Kaliningrado.
Sin embargo, también podría ser una estrategia para reforzar la posición de Moscú en futuras negociaciones diplomáticas sobre el conflicto en Ucrania.
El papel de Bielorrusia en la estrategia nuclear rusa
La inclusión de Bielorrusia como parte de la Unión Estatal resalta su importancia estratégica. Desde el inicio de la guerra, Rusia ha desplegado armas nucleares tácticas en territorio bielorruso, aumentando la presión sobre los países vecinos, especialmente Polonia y Lituania, miembros de la OTAN.
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