En una histórica visita de estado a Londres, el presidente francés, Emmanuel Macron, ha sacudido la política británica al insinuar que la puerta para un retorno del Reino Unido a la UE sigue abierta, al tiempo que sellaba un nuevo pacto migratorio con el Primer Ministro Keir Starmer.
La primera visita de estado de un líder europeo al Reino Unido desde el Brexit se ha convertido en un evento de alto voltaje diplomático. El presidente francés, Emmanuel Macron, ha utilizado su estancia en Londres para lanzar dos mensajes aparentemente contradictorios que han reabierto las heridas del Brexit y, al mismo tiempo, han trazado una nueva hoja de ruta para la cooperación bilateral.
Las Palabras de Macron que Reabren el Debate del Brexit
Durante un discurso en el emblemático Guildhall de Londres, Macron pronunció las palabras que acapararon todos los titulares. «La Unión Europea era más fuerte con el Reino Unido, y el Reino Unido era más fuerte con la Unión Europea», afirmó, para después añadir que, aunque no le corresponde decidir, le «encantaría» ver a ambos trabajando más estrechamente.
Además, no dudó en culpar a las «mentiras del Brexit» de la actual crisis de las pateras en el Canal de la Mancha, un dardo directo a los anteriores gobiernos conservadores. Estas declaraciones han reavivado de inmediato el debate más polarizante de la historia reciente del país.
Un Nuevo Acuerdo para Frenar las Pateras: «Uno Entra, Uno Sale»
Paradójicamente, mientras abría la puerta a una futura reintegración, Macron cerraba un acuerdo muy pragmático con el nuevo gobierno laborista de Keir Starmer para atajar la inmigración irregular. Aunque los detalles son escasos, se ha descrito como un plan piloto para devolver a Francia a un número determinado de inmigrantes que crucen el canal ilegalmente.
Para Starmer, este pacto es una victoria política crucial. Le permite mostrar a un electorado escéptico que su gobierno puede «arreglar el lío» heredado y ser efectivo en el control de fronteras, una de las promesas clave del Brexit que los conservadores no lograron cumplir. Según informes, el plan piloto podría implicar la devolución de hasta 2.600 personas al año.
«Estamos arreglando el lío que heredamos. Estamos tomando con otros países las medidas necesarias para impedir que personas crucen el Canal.» – Keir Starmer, Primer Ministro del Reino Unido.
La Compleja Danza Diplomática Post-Brexit
La visita de Macron encapsula la nueva realidad de la relación franco-británica. Por un lado, una cooperación pragmática en asuntos de interés mutuo, como la inmigración o la defensa, donde también se anunció una coordinación sin precedentes en materia de disuasión nuclear. Por otro, la persistencia de las cicatrices ideológicas y la tensión latente del Brexit.
Macron está ejecutando una jugada de «ambigüedad estratégica». No busca un retorno inminente del Reino Unido, sino consolidar el liderazgo de Francia en Europa. Al posicionarse como el interlocutor indispensable de Londres tanto para hablar de un futuro común como para resolver los problemas del presente, refuerza el papel de París como la potencia diplomática clave en la compleja era post-Brexit.
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