El gobierno de Estados Unidos ha iniciado la deportación de migrantes a la Base Naval de Guantánamo, en Cuba, como parte de su política de control fronterizo. La Casa Blanca confirmó el primer vuelo con personas detenidas en territorio estadounidense, lo que ha generado preocupación entre organizaciones de derechos humanos, que advierten sobre las condiciones de detención en esta instalación militar.
Primeros migrantes trasladados a Guantánamo
Según informó la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, el primer vuelo con migrantes partí de Fort Bliss, Texas, con destino a Guantánamo. Aunque no se especificó el número exacto de personas transportadas, fuentes cercanas al Departamento de Seguridad Nacional indican que podrían ser alrededor de una docena.
“Ya no permitiremos que Estados Unidos sea un vertedero de criminales ilegales de naciones de todo el mundo”, declaró Leavitt en entrevista con Fox News.
El traslado se produce en el contexto de una serie de medidas adoptadas por la administración de Donald Trump para reforzar el control migratorio. En las últimas semanas, más de 3,000 personas han sido detenidas en diversas redadas realizadas en ciudades clave.
Guantánamo se prepara para recibir a miles de migrantes
El presidente Trump ha ordenado la ampliación de la capacidad de detención en la base de Guantánamo para albergar hasta 30,000 migrantes. Para ello, el Pentágono ha desplegado 200 marines, y se espera que este número aumente a 500 en los próximos días.
«Queremos detener a los peores inmigrantes ilegales criminales que representan una amenaza para el pueblo estadounidense», declaró Trump al firmar el memorando que autoriza la ampliación de la base.
Sin embargo, organizaciones de derechos humanos han manifestado su preocupación por las condiciones en las que serán retenidos los migrantes. El Proyecto Internacional de Asistencia a Refugiados (IRAP) denunció que las instalaciones presentan problemas de insalubridad y falta de acceso a servicios básicos.
Preocupación por “detenciones indefinidas”
La medida de trasladar migrantes a Guantánamo ha generado críticas debido a que podría derivar en detenciones prolongadas sin garantías legales. Organismos internacionales han advertido que esta práctica podría violar los derechos de los migrantes, al mantenerlos en un territorio donde no tienen acceso a un debido proceso judicial.
“Estos vuelos preparan el escenario para atroces violaciones de derechos, detenciones indefinidas y aplastantes separaciones familiares”, señaló Hannah Flamm, directora interina de políticas del IRAP.
La base naval de Guantánamo ha sido utilizada anteriormente para la detención de inmigrantes capturados en el mar, pero esta es la primera vez que se convierte en un centro de procesamiento de migrantes arrestados dentro de Estados Unidos.
El impacto en la comunidad migrante
La deportación de migrantes a Guantánamo podría aumentar la incertidumbre entre las comunidades migrantes en Estados Unidos. Defensores de los derechos de los inmigrantes temen que la medida sea utilizada para evitar la supervisión legal y mediática de los casos de detención.Mientras tanto, la Casa Blanca sostiene que la medida es necesaria para reforzar la seguridad fronteriza y evitar que migrantes sin documentos ingresen al país. Sin embargo, la comunidad internacional y diversas organizaciones continúan exigiendo que se respete el debido proceso para todas las personas afectadas por estas políticas.
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