Miembros del colectivo «Guerreros Buscadores de Jalisco» reportaron el hallazgo de más restos humanos en un predio de la zona de Las Agujas, en Zapopan. El descubrimiento se realizó junto a una fosa clandestina donde las autoridades ya habían exhumado 34 cuerpos.
La incansable y peligrosa labor de las familias que buscan a sus desaparecidos en Jalisco ha arrojado un nuevo y sombrío resultado. El colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco confirmó el hallazgo de más restos humanos en un predio de la zona de Las Agujas, en el municipio de Zapopan, un lugar que se consolida como un campo de exterminio.
Este descubrimiento se suma al horror previamente documentado en el mismo sitio. Según informes, la Fiscalía del Estado de Jalisco ya había intervenido en esa área, logrando la localización y exhumación de los cuerpos correspondientes a 34 personas. El hecho de que el colectivo, compuesto por ciudadanos y familiares de víctimas, haya encontrado más restos en las inmediaciones, subraya la magnitud de la tragedia y plantea serias interrogantes sobre el alcance de las investigaciones oficiales.
La justicia en manos de las víctimas
El hallazgo en Zapopan no es un hecho aislado, sino el reflejo de una crisis de desapariciones que lacera a Jalisco y a todo el país. Ante lo que perciben como una respuesta insuficiente por parte de las autoridades, son los propios familiares quienes, equipados con picos, palas y una dolorosa esperanza, se adentran en terrenos controlados por el crimen organizado para buscar a sus seres queridos.
Esta situación pone de manifiesto una fractura en el sistema de justicia. Mientras las cifras oficiales de violencia en el estado siguen siendo alarmantes, con más de 600 homicidios dolosos registrados en los primeros cuatro meses de 2025 , son los colectivos ciudadanos los que a menudo lideran los esfuerzos de localización en campo.
«La Comisión Nacional de Búsqueda ha registrado un aumento en las desapariciones en 15 entidades de la República entre 2022 y 2024, un fenómeno directamente ligado al crimen organizado y los feminicidios.» – Informe de la Comisión Nacional de Búsqueda.
Un patrón de violencia incontenible
Jalisco se ha convertido en un epicentro de esta crisis. Los hallazgos de fosas clandestinas son recurrentes en municipios de la Zona Metropolitana de Guadalajara como Tlajomulco, Tlaquepaque y el propio Zapopan. Cada descubrimiento realizado por los colectivos no solo representa el alivio de una familia que podrá dar sepultura a su ser querido, sino también una evidencia contundente de la incapacidad del Estado para garantizar la seguridad y el derecho a la verdad y la justicia.
Las autoridades de la Fiscalía del Estado aún no han emitido una declaración oficial sobre este nuevo hallazgo del colectivo Guerreros Buscadores. La comunidad y las organizaciones de derechos humanos permanecen a la espera de que se procese la escena con la debida diligencia y se inicien los trabajos de identificación para determinar a cuántas personas más corresponden los restos encontrados, sumando más nombres a una lista que Jalisco y México desearían dejar de contar.
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