En los primeros cuatro meses del año, un total de 359 migrantes originarios de Yucatán, Quintana Roo y Campeche fueron deportados de Estados Unidos, en coincidencia con el arranque del gobierno de Donald Trump, de acuerdo con un informe emitido por la Unidad de Política Migratoria del Gobierno Federal.
El estado con mayor número de repatriados fue Campeche, con 181 personas expulsadas, seguido de Yucatán con 105 casos, y Quintana Roo con 73 deportaciones. Las cifras reflejan un endurecimiento de las políticas migratorias desde la Casa Blanca, particularmente en los primeros meses del nuevo gobierno estadounidense.
Deportaciones desde Yucatán: cifras que no cuadran
Las cifras federales contrastan notablemente con las declaraciones de autoridades estatales. Apenas el pasado 11 de junio, la directora del Instituto para el Desarrollo de la Cultura Maya (Indemaya), Fabiola Loeza Novelo, informó que solo ocho yucatecos habían sido deportados desde Estados Unidos en lo que va del año.
Sin embargo, la dependencia federal asegura que en enero fueron repatriados 43 paisanos yucatecos (39 hombres y 4 mujeres); en febrero, 19 personas (16 hombres y 3 mujeres); en marzo, 22 deportados (21 hombres y una mujer), y en abril, 21 yucatecos más (19 hombres y 2 mujeres), para un total de 105.
Quintana Roo: 13 mujeres entre los repatriados
En el caso de Quintana Roo, las cifras también muestran una tendencia constante. En enero se registraron 27 deportaciones (20 hombres y 7 mujeres); en febrero, 11 (9 hombres y 2 mujeres); en marzo, 12 (11 hombres y una mujer); y en abril, 23 personas más (20 hombres y 3 mujeres). En total, 73 quintanarroenses fueron devueltos a México, de los cuales 13 eran mujeres.
Campeche lidera deportaciones desde EU
Campeche concentra la mitad de los casos en la región peninsular. Tan solo en enero, 54 migrantes campechanos fueron deportados (44 hombres y 10 mujeres). En febrero, 39 (36 hombres y 3 mujeres); en marzo, 44 (42 hombres y 2 mujeres), y en abril, nuevamente 44 personas (39 hombres y 5 mujeres). El total acumulado asciende a 181 deportados, incluidos 20 mujeres.
El repunte en las deportaciones durante el primer cuatrimestre del año coincide con la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, quien desde su campaña prometió reforzar las acciones contra la migración indocumentada, principalmente desde México y Centroamérica.
Organizaciones defensoras de derechos humanos han alertado sobre el impacto que estas políticas tienen en las comunidades migrantes, muchas de las cuales llevan años radicando en Estados Unidos o cuentan con hijos nacidos allá.
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