La Ciudad de México ha logrado contener el brote de sarampión que se registró a inicios de septiembre. De acuerdo con la Secretaría de Salud (Sedesa), en las últimas siete semanas no se ha reportado ningún nuevo caso de la enfermedad, manteniendo el total en seis contagios, todos ellos ya recuperados.

La titular de la dependencia, Nadine Gasman Zylberman, informó que, si no se presentan más casos, el próximo 23 de noviembre se declarará oficialmente el cierre del brote.

Seis casos controlados y una respuesta rápida

Durante su comparecencia ante comisiones del Congreso de la Ciudad de México, la secretaria explicó que ninguno de los seis casos fue grave y que todos los pacientes superaron la enfermedad sin complicaciones.

“Fueron casos aislados, ninguno contagió, se hicieron barridos en 25 manzanas a la redonda de sus domicilios, centros de trabajo o escuelas, y no se detectaron nuevos contagios”, detalló Gasman.

Según la Sedesa, esta contención fue posible gracias al alto nivel de inmunidad en la población, reforzado por una campaña intensiva de vacunación que incrementó la cobertura de manera significativa.

Hasta la fecha, se han aplicado más de 623 mil vacunas contra el sarampión en escuelas, centros de salud, hospitales, kioscos móviles, el Metro, terminales de autobuses y el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).

Coordinación institucional clave para contener el brote

Gasman Zylberman destacó la labor del Comando Estatal Interinstitucional del Sector Salud en la Ciudad de México (CEISS-CDMX), el cual permitió coordinar esfuerzos entre todas las instituciones públicas del sector para responder de manera oportuna.

Esta coordinación fue determinante para atender la emergencia sanitaria registrada el pasado 10 de septiembre en Puente la Concordia, Iztapalapa, donde se identificaron los primeros casos.

“Hay capacidad, lo probamos con 84 pacientes que fueron trasladados a diferentes hospitales públicos, todos ellos recibieron atención con un alto grado de capacidad técnica”, aseguró la titular de la Sedesa.

Actualmente, indicó, tres personas permanecen hospitalizadas, de las cuales dos se encuentran en condición grave, aunque no relacionadas con el brote de sarampión.

Preparación sanitaria rumbo a la Copa Mundial de 2026

Además de informar sobre la situación epidemiológica, la funcionaria adelantó que la coordinación interinstitucional implementada durante este brote será un mecanismo clave para la preparación sanitaria de la Ciudad de México rumbo a la Copa Mundial de Fútbol 2026.

En colaboración con el gobierno federal, se pondrá en marcha un plan integral de prevención y control sanitario que garantice condiciones seguras para los visitantes y residentes durante la justa deportiva.

“Se verificará el saneamiento básico, el abastecimiento y desinfección de agua, la disposición de excretas, el manejo de residuos y el control de fauna nociva. También se supervisarán los productos destinados al consumo humano en zonas de alta concentración de personas”, explicó Gasman.

Asimismo, se realizarán recorridos en unidades médicas estratégicas para detectar y corregir posibles riesgos sanitarios, especialmente en áreas cercanas a estadios, hoteles y zonas turísticas.

Atención médica y respuesta ante emergencias

El plan sanitario rumbo al Mundial contempla también un fortalecimiento del sistema de atención prehospitalaria, con cobertura integral durante los partidos y eventos relacionados con la competición.

Para ello, se habilitará una plataforma digital que permitirá optimizar el despacho de ambulancias y mejorar la respuesta ante emergencias médicas en tiempo real.

“Estamos trabajando con todas las instituciones prestadoras de servicios de salud para garantizar la recepción y atención de pacientes en caso de incidentes”, afirmó la secretaria.

Este enfoque busca consolidar un modelo de respuesta rápida y coordinada, replicable para futuros eventos masivos en la capital.

Un ejemplo de vigilancia epidemiológica efectiva

La contención del brote de sarampión representa un caso exitoso de respuesta epidemiológica en la Ciudad de México, demostrando la eficacia de la vacunación masiva y la coordinación institucional.

Expertos en salud pública destacan que el sarampión, una enfermedad altamente contagiosa que había sido eliminada en México desde 1996, sigue representando un riesgo si disminuye la cobertura de vacunación, especialmente en zonas urbanas densamente pobladas.

El esfuerzo conjunto entre la Sedesa, el CEISS-CDMX, el IMSS, el ISSSTE y otras instituciones permitió romper las cadenas de transmisión, proteger a la población y reforzar la vigilancia epidemiológica en toda la capital.

A menos de un mes de que se cumpla el plazo para declarar el fin del brote de sarampión en la Ciudad de México, las autoridades capitalinas mantienen una postura de vigilancia activa y compromiso con la salud pública.

El éxito de esta respuesta sanitaria no solo evita nuevos contagios, sino que fortalece la preparación de la capital para eventos internacionales como el Mundial 2026, consolidando a la CDMX como una ciudad resiliente, coordinada y preparada ante emergencias sanitarias.