Las amenazas de bomba que durante las últimas tres semanas afectaron a distintos planteles de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ahora se han trasladado a la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), específicamente a la unidad Cuajimalpa, donde se reportó un posible artefacto explosivo este lunes.

Verificación y protocolos de seguridad en la UAM

Tras recibir la alerta, la UAM activó sus protocolos de seguridad y procedió a la revisión exhaustiva de las instalaciones. De acuerdo con la universidad, se trató de una falsa alarma, y no se halló ningún objeto sospechoso en el campus.

En un comunicado oficial, la institución destacó que trabajó en estricto apego a su autonomía y en coordinación con las autoridades de la Ciudad de México, asegurando que se llevó a cabo una inspección completa del campus sin incidentes.

Investigación y apoyo de la Policía Cibernética

La UAM anunció que se realizarán investigaciones para identificar a los responsables de la amenaza y deslindar responsabilidades. Para ello, contarán con el apoyo de la Policía Cibernética de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX, encargada de rastrear posibles fuentes digitales de este tipo de alertas.

Este procedimiento busca no solo esclarecer los hechos, sino también prevenir futuras amenazas y mantener la integridad de la comunidad universitaria.

Llamado a la alerta y prevención entre estudiantes y personal

La universidad hizo un llamado a estudiantes, docentes y personal para mantenerse atentos ante cualquier situación que pueda poner en riesgo su seguridad. La institución destacó la importancia de construir espacios seguros y libres de violencia, fomentando la confianza mutua y los lazos de protección dentro de la comunidad educativa.

“Entre todos podremos construir espacios seguros, libres de violencia y creando lazos de protección y confianza mutua que nos permitan desarrollar nuestras actividades cotidianas”, concluyó la UAM en su comunicado.

Contexto: amenazas recientes en la UNAM

Durante las últimas tres semanas, varios planteles de la UNAM han sido objeto de alertas de bomba que obligaron a activar protocolos de emergencia, desalojar instalaciones y coordinar revisiones con autoridades locales. Aunque la mayoría de estos incidentes también resultaron ser falsas alarmas, generaron preocupación entre la comunidad universitaria, evidenciando la necesidad de reforzar medidas de seguridad en las instituciones educativas.

Medidas preventivas y continuidad académica

La UAM aseguró que sus acciones se enfocan en garantizar la continuidad de las actividades académicas sin poner en riesgo a estudiantes y personal. La implementación de medidas preventivas, el monitoreo constante de amenazas y la cooperación con autoridades locales son elementos clave para mantener un entorno seguro en todos los campus.

De esta manera, la universidad busca equilibrar la seguridad con la autonomía institucional, asegurando que los espacios educativos puedan operar con normalidad mientras se toman precauciones ante cualquier incidente similar.

Compromiso institucional con la seguridad

Con la activación de sus protocolos y la coordinación con la Policía Cibernética, la UAM reafirma su compromiso con la protección de su comunidad y la prevención de situaciones de riesgo. Estas acciones forman parte de una estrategia más amplia de vigilancia y control que busca minimizar amenazas y garantizar que tanto estudiantes como personal puedan continuar sus actividades de manera segura.

Aunque las amenazas de bomba han generado alarma en el ámbito educativo de la Ciudad de México, la pronta reacción de la UAM en la unidad Cuajimalpa y su coordinación con autoridades demuestra un manejo eficiente de la seguridad, priorizando la protección de la comunidad universitaria y la integridad de sus instalaciones.