Salud para migrantes es un derecho humano fundamental y no un privilegio condicionado, afirmó el secretario de Salud, David Kershenobich, durante la presentación de la Estrategia Nacional para la Atención a la Salud de Personas en Contexto de Movilidad Humana, una política pública impulsada por el Gobierno de México con enfoque humanista, de equidad y respeto a los derechos humanos.

En el marco del Día Internacional de las Personas Migrantes, el funcionario subrayó que el Estado mexicano reconoce los desafíos estructurales que enfrentan las personas en movilidad y asume la responsabilidad institucional de garantizarles el acceso efectivo a servicios médicos, sin importar su origen, situación migratoria o condición social.

Un enfoque humanista para atender la movilidad humana

Kershenobich destacó que México aborda el fenómeno migratorio desde una visión humanista, reflejada en la estrategia México te Abraza, la cual busca asegurar un trato digno y una atención integral a las personas migrantes y repatriadas.

“La iniciativa México te Abraza representa un eje fundamental para garantizar la dignidad de quienes enfrentan separación familiar, barreras culturales, discriminación y escenarios de alta vulnerabilidad”, explicó el titular de Salud, al recalcar que estas condiciones incrementan los riesgos sanitarios y la exclusión del sistema de atención médica.

El funcionario sostuvo que la política pública debe responder no solo a emergencias, sino a una visión de largo plazo que incorpore la prevención, la atención primaria y la continuidad del cuidado médico.

Barreras estructurales que limitan el acceso a la salud

Durante su intervención, Kershenobich advirtió que persisten obstáculos significativos que impiden el acceso oportuno a la salud de las personas migrantes, entre ellos la falta de seguridad social, la ausencia de documentación migratoria y la desvinculación institucional.

Estas barreras, señaló, generan rezagos en diagnósticos, tratamientos incompletos y un mayor riesgo de complicaciones, particularmente en poblaciones vulnerables como niñas, niños, mujeres embarazadas, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas.

“El derecho a la salud está garantizado por la Constitución y no debe entenderse como un privilegio. La atención médica debe brindarse con equidad, pertinencia cultural y trato humano”, enfatizó.

Coordinación interinstitucional para una atención integral

La secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, reconoció el papel del titular de Salud en la coordinación del Gabinete de Salud que participa en la Estrategia Nacional de Repatriación México te Abraza, destacando el trabajo conjunto de instituciones como el IMSS, ISSSTE, IMSS-Bienestar, la Secretaría de Salud y CONASAMA.

Gracias a este esfuerzo interinstitucional, del 20 de enero a la fecha, se ha recibido a aproximadamente 145 mil 537 connacionales, quienes han recibido miles de atenciones médicas, permitiendo procesos de reintegración digna con acceso a servicios básicos y de salud.

Rodríguez subrayó que la atención a la salud es clave para una reintegración social efectiva y para reducir los riesgos de exclusión, pobreza y violencia.

Seis líneas de acción para proteger la salud de migrantes

Por su parte, Ramiro López Elizalde, subsecretario de Políticas de Salud y Bienestar Poblacional, explicó que la Estrategia Nacional se estructura en seis líneas de acción: garantizar el acceso a servicios de salud; fortalecer la educación y promoción sanitaria; prevenir enfermedades; mejorar la salud sexual y reproductiva; atender la salud mental; y dar seguimiento integral a la población en movilidad.

Estas acciones se articulan mediante ejes transversales como una gobernanza efectiva, una atención primaria cercana, el abordaje de los determinantes sociales de la salud y una visión de curso de vida, que permita acompañar a las personas migrantes en todas sus etapas garantizando su salud.

Derechos humanos y movilidad sin criminalización

El subsecretario de Derechos Humanos, Arturo Medina, reiteró que la política migratoria de México es humanista y no criminaliza la movilidad. “Reconocemos los derechos de todas las personas, sin importar su nacionalidad o estatus migratorio”, afirmó.

En el mismo sentido, Daniel Aceves Villagrán, director general de Políticas de Salud Pública, señaló que esta fecha permite visibilizar las aportaciones de la población migrante y reforzar el compromiso del Estado mexicano con la protección de sus derechos fundamentales.

Una política de salud basada en dignidad y justicia social

La Estrategia Nacional para la Atención a la Salud de Personas en Contexto de Movilidad Humana consolida una política pública centrada en la dignidad humana, la justicia social y el respeto irrestricto a los derechos humanos.

Al colocar la salud para migrantes como una prioridad del Estado, el Gobierno de México envía un mensaje claro: la movilidad humana y la salud debe ser atendida con empatía, responsabilidad institucional y acciones concretas que garanticen que nadie quede fuera del acceso a la atención médica.