En un espacio donde la libertad parece perdida, la esperanza encontró un lugar para florecer. “Mi plato es tu plato”, un evento único organizado en el Centro de Readaptación Social de Almoloya de Juárez, convirtió un penal en un santuario de sabores, emociones y reflexión.
Este encuentro, liderado por la fundación “Plan B”, reunió a chefs reconocidos internacionalmente y a mujeres privadas de la libertad (PPL) que han recorrido un arduo camino de reinserción. Más allá de los manjares servidos, esta iniciativa ofreció una poderosa lección: la libertad no solo está en las paredes que nos rodean, sino en las decisiones y la esperanza de un futuro mejor.
Como parte de las acciones implementadas en el Estado de México para fomentar la reinserción social de las personas privadas de la libertad, hoy acompañé a la Gobernadora @delfinagomeza en la presentación del plan "Mi plato es tu plato", el cual se realiza a través de la… pic.twitter.com/dBpllgncsv
— Cristóbal Castañeda (@Mtro_CCastaneda) December 5, 2024
Un banquete de empatía y esperanza
En un entorno donde predominan las rejas y el silencio, los chefs Gaby Ruiz, Enrique Olvera, Elena Reygadas, entre otros, llevaron los sabores más emblemáticos de México a las internas.
La cocina como terapia del alma
- Sabores con memoria: Una mujer PPL compartió: «Cuando hay presencia de un olor o un sabor, se despiertan los recuerdos del alma».
- Gastronomía y humanidad: Cada plato servido no solo llenó estómagos, sino que se convirtió en un símbolo de empatía y dignidad para quienes más lo necesitan.
“Plan B”: más que un evento, un movimiento transformador
La fundación “Plan B”, liderada por Tatiana Ortiz Monasterio y Vanessa Coppel, no se limita a eventos como «Mi plato es tu plato». Su misión es ambiciosa: lograr que esta sea la última generación de mujeres en prisión.
Programas que generan cambio
- Video Academia Penitenciaria:
- Ofrece educación en 38 penales femeniles de 18 estados de México, enfocándose en el desarrollo personal y profesional.
- Talleres productivos:
- Las internas participan en talleres de costura cuyos productos se venden en hechoenprision.mx.
- Acceso a la cultura:
- Una biblioteca con libros dedicados por donantes les brinda un refugio de conocimiento y reflexión.
Historias de vida: lecciones desde la prisión
Cada mujer privada de la libertad tiene una historia que contar. Muchas enfrentaron infancias difíciles y tomaron decisiones equivocadas que las llevaron a prisión, pero estas iniciativas las han ayudado a encontrar un nuevo propósito.
Voces desde dentro
- Una interna reflexionó: “Aquí no solo perdí mi libertad, sino también abrazos, risas y el futuro que soñé”.
- Otra compartió: “A pesar de llevar más de la mitad de mi vida en prisión, he aprendido a ser más libre y feliz”.
Libertad más allá de las rejas
El mensaje de “Mi plato es tu plato” trasciende las paredes de Almoloya: todos cometemos errores, pero también tenemos derecho al perdón y a reconstruir nuestras vidas.
El verdadero significado de libertad
- Libertad no siempre es la ausencia de rejas, sino la capacidad de romper con las cadenas internas, muchas veces autoimpuestas.
- Como dijo una mujer PPL: «Las decisiones que tomamos sin reflexionar son la verdadera prisión».
El ingrediente secreto para una vida plena
El evento «Mi plato es tu plato» no solo fue un banquete gastronómico, sino una lección de vida. En palabras de una interna, «he aprendido a ser más libre y feliz aquí dentro que afuera».
La fundación “Plan B” nos recuerda que, con empatía, educación y oportunidades, es posible transformar vidas y construir un futuro donde la libertad sea un derecho universal, no un privilegio.
Porque el verdadero INGRIDiente secreto de la vida es aprender a ser libres, felices y, sobre todo, humanos.
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