Después de días de tensión, incertidumbre y preocupación, los padres, madres y tutores del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Sur se reunieron este lunes con las autoridades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) para continuar la segunda mesa de diálogo, enfocada en reforzar la seguridad y la atención psicológica de los alumnos.
El encuentro, realizado en un ambiente más sereno que el primero, marcó un paso importante hacia la reconstrucción de la confianza entre las familias y la institución. A pesar del tono cordial, los padres mantuvieron un firme llamado a la acción: quieren conocer los protocolos, la instalación de detectores de metales, y cómo se ampliará la atención psicológica para los jóvenes que lo soliciten.
El grito de los padres: “no queremos otro caso más”
Entre los temas más delicados estuvo la preocupación por los grupos de alumnos que se autodenominan “incels”. Los tutores exigieron claridad sobre las medidas que la universidad tomará para evitar conductas violentas o discriminatorias.
Durante la reunión, una psicóloga de la UNAM explicó que muchos jóvenes que buscan ayuda emocional llegan con sentimientos de soledad, baja autoestima y abandono familiar, y que algunos incluso abandonan las terapias.
“Necesitamos crear vínculos, estructuras de afecto y empatía”, señaló la especialista, subrayando la urgencia de fortalecer el acompañamiento psicológico y familiar.
La profesional detalló que el programa Espora Psicológica ha permitido canalizar a estudiantes con crisis severas, e incluso algunos han recibido atención hospitalaria en el Psiquiátrico Fray Bernardino, mostrando la gravedad del problema.
UNAM anuncia nuevos acuerdos y acciones concretas
La secretaria general de la UNAM, Patricia Dávila, informó que se alcanzaron acuerdos con los estudiantes del CCH Sur que incluyen un cronograma de actividades y medidas inmediatas para reforzar la seguridad.
“Hemos trabajado con respeto, escucha activa y compromiso. Los directores han convocado a sus comunidades para revisar y mejorar protocolos”, afirmó Dávila Aranda.
Entre las medidas destacan la instalación de detectores de metales, la mejora de iluminación, la vigilancia con cámaras y la creación de brigadas de padres que colaborarán en actividades dentro del plantel.
La funcionaria añadió que la Gaceta UNAM de esta semana aborda de manera especial el tema de la salud mental estudiantil, con el objetivo de informar a la comunidad sobre las herramientas disponibles y las rutas de atención psicológica.
Hacia un regreso seguro y con confianza
La UNAM espera que el CCH Sur reanude clases la próxima semana, tras concluir las mesas con profesores y padres. La secretaria general destacó que estas acciones reflejan la capacidad de la universidad para enfrentar los retos con autonomía, inclusión y responsabilidad.
Este proceso de diálogo no solo busca resolver una crisis puntual, sino reconstruir un entorno de confianza donde estudiantes, profesores y familias colaboren para garantizar una educación segura, libre y empática.


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