La frontera sur de México fue escenario de una operación crucial este viernes 3 de enero, cuando un operativo sorpresa coordinado entre autoridades federales y estatales logró el rescate de ocho migrantes privados de su libertad en Frontera Comalapa, Chiapas.
El despliegue, dirigido por la Fuerza de Reacción Inmediata Pakal (FRIP), con apoyo de la Guardia Nacional, el Ejército Mexicano y la Fiscalía General del Estado (FGE), también resultó en la detención de tres presuntos miembros de organizaciones criminales, el aseguramiento de vehículos blindados y la incautación de ranchos utilizados por estas células delictivas.
El gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar, destacó la relevancia del operativo al compartir detalles en su cuenta de X (antes Twitter):
“Rescatamos a ocho personas extranjeras, detuvimos a tres presuntos delincuentes y aseguramos vehículos y propiedades usadas por grupos criminales.”
El hallazgo: vehículos blindados y una bodega del crimen
Durante el operativo, las autoridades catearon casas de seguridad, ranchos y una bodega que funcionaba como centro de almacenamiento y construcción de vehículos blindados, conocidos como “coches monstruo”.
En el lugar se aseguraron:
- 15 vehículos ligeros.
- 4 vehículos pesados.
- 5 vehículos ‘monstruo’.
- Además, se recuperaron semovientes robados.
Estos vehículos, adaptados para soportar balas y explosivos, son usados frecuentemente por células criminales para controlar rutas estratégicas de tráfico de drogas, armas y personas en la región fronteriza.
El rostro del crimen organizado en la frontera sur
Chiapas, uno de los estados más afectados por la pobreza en México, enfrenta un creciente control territorial por parte de grupos delictivos como el Cártel de Sinaloa (CDS), el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y pandillas locales. Estas organizaciones luchan por dominar rutas clave que conectan México con Guatemala, lo que ha derivado en:
- Bloqueos y enfrentamientos armados.
- Desplazamientos forzados: Cientos de familias han tenido que abandonar sus hogares.
- Extorsiones a migrantes: Tarifas para cruzar rutas controladas por el crimen organizado.
- Paralización económica y educativa: La violencia afecta directamente las actividades diarias.
Crisis migratoria y humanitaria: una realidad alarmante
En medio de este panorama, las personas migrantes son las más afectadas. En su travesía hacia Estados Unidos, estas personas suelen enfrentarse a:
- Secuestros y extorsiones.
- Violencia de grupos criminales.
- Condiciones inhumanas en casas de seguridad.
El rescate de los ocho migrantes en Frontera Comalapa refleja solo una pequeña fracción de la crisis que se vive en la región. Aunque no se han revelado detalles sobre la nacionalidad ni el estado de salud de las personas rescatadas, este caso subraya la urgencia de fortalecer estrategias de seguridad y atención humanitaria en la frontera.
Una operación que marca la diferencia: resultados y próximos pasos
La operación en Chiapas destaca la coordinación entre niveles de gobierno para enfrentar la amenaza del crimen organizado en la frontera. Sin embargo, las autoridades reconocen que queda mucho por hacer.
Eduardo Ramírez Aguilar reafirmó su compromiso de garantizar la seguridad en la región, instando a la ciudadanía a denunciar actividades sospechosas. Además, se espera que este operativo sea el primero de muchos que permitan recuperar el control territorial y proteger a las personas más vulnerables.
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