El 3 de febrero de 2025, la noticia de la muerte de Mario Alberto Jiménez Castro, alias “Kastor”, sacudió las redes y el mundo del narcotráfico. Este operador financiero de Los Chapitos era buscado por Estados Unidos por delitos relacionados con el tráfico de fentanilo, lavado de dinero y posesión de armas. Su asesinato en el Estado de México pone fin a una de las piezas clave del cártel de Sinaloa, pero deja muchas preguntas abiertas.
En abril de 2023, la Corte del Distrito Sur de Nueva York emitió una acusación contra 28 integrantes de Los Chapitos, responsabilizándolos del envío de fentanilo a EE.UU. Entre los nombres más relevantes figuraban:
Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, líderes de la organización.
Óscar Noé Medina González (“Panu”) y Néstor Isidro Pérez Salas (“Nini”), jefes de seguridad.
Mario Alberto Jiménez Castro (“Kastor”), operador financiero y pieza clave en el lavado de dinero.
Los cargos contra Kastor incluían:
- Conspiración para importar y distribuir fentanilo en EE.UU.
- Lavado de dinero mediante criptomonedas.
- Posesión de ametralladoras y artefactos destructivos.
De ser capturado y procesado en EE.UU., enfrentaba una pena mínima de 40 años de prisión.
El papel de ‘Kastor’ en la red financiera de Los Chapitos
Las investigaciones del Departamento del Tesoro de EE.UU. revelaron que Jiménez Castro se había convertido en uno de los tres principales administradores financieros de Los Chapitos, junto con Julio Marín González y Sergio Duarte Frías.
Su especialidad era el lavado de dinero con criptomonedas. Entre agosto de 2022 y febrero de 2023, él y Duarte Frías dirigieron una operación que recolectaba dinero de traficantes en ciudades como:
- Nueva York
- Boston
- Denver
- Nashville
- Omaha
- Salt Lake City
El dinero se depositaba en carteras digitales para luego ser trasladado a México sin dejar rastros en el sistema bancario. Se estima que, en seis meses, lograron blanquear más de 869 mil dólares (unos 17 millones de pesos mexicanos).
Asesinato en el Edomex: ¿Qué pasó con ‘Kastor’?
El 3 de febrero de 2025, familiares y amigos de Kastor publicaron mensajes en redes sociales que sugerían su muerte. Horas después, trascendió que el operador de Los Chapitos había sido asesinado en el Estado de México.
Cuando las autoridades revisaron sus documentos, encontraron que portaba una licencia de conducir falsa con el nombre de Gerardo Castro Medina, lo que sugiere que se movía con identidades falsas para evitar ser capturado.
Aunque no se han revelado detalles sobre quién ordenó su ejecución, las hipótesis incluyen:
- Venganza interna dentro de Los Chapitos.
- Operativo encubierto de fuerzas de seguridad mexicanas.
- Traición de algún aliado dentro del crimen organizado.
Su asesinato pone fin a la persecución internacional en su contra, pero deja abierta la interrogante sobre quién tomará su lugar dentro del cártel.
El impacto de la muerte de ‘Kastor’ en Los Chapitos
La desaparición de uno de los principales operadores financieros del grupo no solo afecta su estructura, sino que también puede:
- Desestabilizar el flujo de dinero dentro de la organización.
- Abrir disputas internas por el control del lavado de dinero.
- Atraer mayor presión de EE.UU. sobre el cártel de Sinaloa.
Además, con la creciente presión de la DEA y el gobierno estadounidense sobre el tráfico de fentanilo, la eliminación de figuras clave como Kastor podría intensificar los operativos contra Los Chapitos en México y EE.UU.
Conclusión: Fin de una pieza clave, pero no del negocio
La muerte de Mario Alberto Jiménez Castro “Kastor” en el Estado de México cierra un capítulo en la lucha contra el narcotráfico, pero no detiene la operación de Los Chapitos. Mientras su estructura financiera continúe funcionando, el tráfico de fentanilo y el lavado de dinero seguirán representando un desafío para las autoridades.
La gran pregunta ahora es: ¿Quién ocupará su lugar dentro del cártel?
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